Es para sostener su plan de inversiones por USD 2.700 millones. El objetivo de la empresa es no hacer nuevos aumentos después de completado el cronograma anunciado.
La petrolera privada bajo control estatal YPF confirmó que realizará varios ajustes a los precios de sus surtidores en los próximos tres meses. La suba será del 18% en 90 días, en línea con los aumentos impositivos, del precio internacional del barril y la inflación interna, informaron ejecutivos de la compañía. Por encima de ese valor, además, se sumarán los aumentos de impuestos que se vayan aplicando. El próximo martes se verá la primera suba en surtidores. Será del orden del 7 por ciento.
“Vamos a incrementar los precios en 3 meses un 15 por ciento, más las subas de impuestos. Tenemos que generar y nutrirnos de fondos para desarrollar nuestro plan de negocios y las inversiones”, aseguró Sergio Afrontti, CEO de la petrolera, en un evento que fue transmitido internamente y del que participaron de manera virtual los gobernadores Rodolfo Suárez (Mendoza) y Omar Gutiérrez (Neuquén y presidente de la OFEPHI); las gobernadoras Alicia Kirchner (Santa Cruz) y Arabella Carreras (Río Negro); el ministro de desarrollo productivo, Matías Kulfas y el secretario de Energía, Darío Martínez, entre otros funcionarios nacionales, provinciales y directivos y empleados de la empresa. En el auditorio de YPF estuvo presente Sergio Zilliotto, gobernador de La Pampa.
El 18% total para el trimestre se alcanza sumando 15 puntos de actualización de precios y otros 3 de traslado de impuestos al valor final.
“No queremos que la gente se entere a la mañana de los aumentos. Queremos previsibilidad y para eso trabajamos”, agregó el nuevo presidente de la petrolera, Pablo González, quien aseguró que cambiará el esquema del impuesto a los combustibles líquidos, algo que le confirmó el Presidente que se hará por la ley para el sector que anunció el 1 de marzo en el Congreso.
“Son los fondos que necesitamos para desarrollar el plan de inversiones y si las elecciones fueran en abril lo hubiéramos hecho igual. Queremos producir y todo lo recaudado irá a producción”, dijo. “No vamos a modificar nada que afecte a la industria (...) No somos una financiera, tenemos que producir gas y petróleo”, insistió González.
“Tenemos la segunda reserva de gas no convencional y la cuarta de crudo. No le hicimos ningún favor a Repsol. Tenemos que desarrollar los recursos de petróleo y gas, no invertir en monopatines eléctricos”, dijo por último en referencia a políticas pasadas de la firma.
Este viernes se actualizaron dos impuestos que impactan en los precios de las naftas y el gasoil: el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC), que se incrementan en forma trimestral de acuerdo a la inflación. Si bien la actualización estaba prevista para comienzos de este mes, por un decreto se trasladó a este 12 de marzo. Durante 2019 y 2020 la aplicación de estos impuestos había tenido varias suspensiones.
Sin embargo, las petroleras aún no trasladaron estas subas a los precios finales en las estaciones de servicio, aunque en el sector esperaban un posible aumento para los próximos días. Es que a la actualización de impuestos, durante marzo se sumaron también otros factores: entre ellos, un incremento en los valores de los biocombustibles a comienzos de mes que también generó presión para una nueva suba, ya que las refinadoras están obligadas a usar biodiésel y bioetanol para mezclar la producción de naftas y gasoil. Los precios de estos insumos son fijados por la Secretaría de Energía.
Desde que comenzó el año, los combustibles ya tuvieron cuatro incrementos. El último fue el pasado 15 de febrero, aunque no se aplicó por igual en todas las provincias y en algunas ciudades hubo acomodamientos de los valores a la baja. En la ciudad de Buenos Aires, los precios se incrementaron –en promedio– alrededor de 12% en los dos primeros meses del año.