El interventor del Hospital Posadas, Alberto Maceira, declaró de manera testimonial este martes ante la jueza a cargo del caso, María Eugenia Capuchetti, y reconoció haber estado al frente de la vacunación de los 10 implicados en el operativo que se llevó adelante en el segundo piso del Ministerio de Salud. También prestó declaración la encargada de vacunación del nosocomio, María Elena Borda. Ambos se mostraron con bronca por verse involucrados en esta situación, según publica el diario Clarín.

Maceira admitió que fue él quien encabezó la inmunización de los integrantes del vacunatorio VIP, entre los que sobresalieron Horacio Verbitsky, Jorge Taiana y Eduardo Valdés.

​Además, habría reconocido que previamente habría asistido a Olivos a aplicarle la segunda dosis al presidente Alberto Fernández, lo cual no había sido revelado.

Según Maceira y Borda, fueron las únicas dos oportunidades en las que salieron del Posadas para vacunar a funcionarios. También revelaron que además de ellos fueron al ministerio un chofer, un médico y un administrativo.

Destacaron, además, que en el quinto piso del ministerio hay un vacunatorio, que se usa para aplicar las dosis contra la gripe, por ejemplo. Pero en este caso, los vacunados VIP fueron a una antesala del despacho de Ginés, en el segundo piso, adonde fueron pasando de a uno.

Capuchetti, junto al fiscal Eduardo Taiano (que también participó de la declaración), son quienes se encuentran al frente de la investigación que se inició en medio de las múltiples denuncias que llegaron por el escándalo del vacunatorio VIP.

Todas las denuncias fueron radicadas en los juzgados 5 y 6, ambos a cargo de Capuchetti, ya que el 6 lo subroga tras la jubilación de Eduardo Canicoba Corral.

​Se acusa a los involucrados por "abuso de autoridad" y los primeros imputados por Taiano fueron González García y su sobrino, Lisandro Bonelli, quien estaba a cargo de la Jefatura de Gabinete del Ministerio de Salud.

Ambos especialistas en salud dijeron también que las llamadas que recibieron para ir a realizar las vacunaciones al Ministerio de Salud, a Olivos en el caso de Fernández, provenían del secretario de Ginés González García, Marcelo Guille, y del subsecretario de Gestión de Servicios e Institutos, Alejandro Collia.

​Ellos eran quienes les informaban qué personas debían vacunarse. Se excusaron, en ese sentido, de tener que acatar órdenes por tratarse de pedidos de funcionarios de rango más alto.

Previamente, Taiano había pedido a la jueza que se secuestren las constancias de los viajes realizados por los autos oficiales del Ministerio de Salud hacia y desde el Hospital Posadas, ubicado en El Palomar, partido de Morón.

Fuente: Clarín