Ella es Lins, él es Nick. Juntos forman una pareja con creciente popularidad en las redes. Como otros influencers de los viajes muestran seductores paisajes, pero estos treintañeros lo hacen al natural. Sin imposturas. Sin tapujos, literalmente. Las fotos hablan por sí mismas. Son viajeros naturistas. Cuentan sus aventuras en el blog Naked Wanderings.
Con esa naturalidad han pasado la pandemia. El cierre de fronteras en el mes de marzo les pilló en Cuba, pero tuvieron tiempo de tomar un avión a México. Allí pasaron los siguientes tres meses en un pequeño pueblo en la costa del Pacífico llamado Zipolite, con "una de las playas nudistas más increíbles del mundo".
La pareja, que se conoce desde hace 12 años, descubrió el naturismo en un spa en Bélgica donde solo dejaban bañarse desnudos. "Fue un gran paso fuera de nuestra zona de confort, pero nos lanzamos y nos encantó la experiencia", explica Nick por correo electrónico. "Poco después quisimos explorar otros lugares que pudiéramos disfrutar sin ropa".

Para Lins es una excelente manera de viajar. "Es tan fácil... No tienes que preocuparte por qué ponerte y si tu cuerpo se va a ver bien con esa ropa. Puedes ser tú mismo. Además, algunas cosas son más divertidas cuando estás desnudo. Probablemente el mejor ejemplo sea la natación. Una vez que pruebes la inmersión al desnudo, ¡no hay forma de volver al traje de baño!"
Enseguida se dieron cuenta también de que la información sobre el naturismo que hay disponible online era casi siempre aburrida y llena de reglas. "Lo que habíamos descubierto era un estilo de vida divertido, lugares donde las personas se respetan y son amables entre ellas, y mucha libertad". De ahí surgió la idea del blog: el naturismo a través de los ojos de Lins y Nick.
Veinte países y tres años después, Naked Wanderings es un trabajo a tiempo completo. Del naturismo de Sudamérica, donde el movimiento es bastante joven, al de Tailandia, que atrae a muchas personas y culturas diferentes. "En Tailandia, hemos compartido mesa en balnearios naturistas con budistas, cristianos, hindúes, musulmanes, ateos... Religiones que en el mundo vestido no se llevan bien, pero cuando todos están desnudos pueden convertirse en una sola comunidad".
Y, por supuesto, Europa. "Simplemente no encontrarás tanta variedad en ningún otro lugar del mundo".

ESCAPADA A ALICANTE
La pareja estuvo en Alicante el año pasado visitando los complejos Finca Pura Vida y Lavinia. "De España nos encanta que haya tantas playas nudistas. Incluso en las no nudistas notamos que el desnudo es bastante común. El hecho de que muchas mujeres toman el sol en topless dice mucho sobre la positividad corporal y la aceptación general del desnudo".
Nick y Lins admiten que ellos mismos no se atrevieron a contar a nadie que eran naturistas. "Teníamos miedo de ser juzgados, de que la gente pensara que somos raros o pervertidos, pero cuando empezamos a contarlo nos dimos cuenta de que no despertaba reacciones negativas".

DESNUDOS EN LAS REDES

¿Y las estrictas reglas de las redes sociales? "En Facebook duramos aproximadamente una semana. Pensamos que los desnudos no sexuales no eran un problema. Definitivamente lo era. Así que tuvimos que adaptarnos".
Es decir, recurrieron a la autocensura. En sus fotos siempre hay algún elemento del paisaje que tapa justo lo que Facebook no permite desvelar. La ventaja es que "mantiene alejados a muchos pervertidos. Nuestras fotos son demasiado aburridas para ellos". También esto se ha convertido en parte de su marca. Pero aunque siguen las reglas, el naturismo tiene sus riesgos. "El año pasado perdimos nuestra cuenta de Instagram con unos 50.000 seguidores. Así que tuvimos que empezar de nuevo desde cero", se lamenta Nick.

El Mundo