El presidente del gobierno español afirmó que el "número real" de personas infectadas desde el inicio de la pandemia "supera los 3 millones", 2 millones más que los registrados.
El "número real" de personas con coronavirus en España desde el inicio de la pandemia "supera los 3 millones", 2 millones más que los registrados, afirmó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, luego de que la región de Madrid prohibiera reuniones nocturnas entre personas no convivientes para tratar de contener la enfermedad.
"La situación es grave y entre todos debemos actuar con determinación, con la máxima disciplina social y con la necesaria e imprescindible unidad", dijo Sánchez en una intervención sobre la situación sanitaria en España, uno de los países más afectados por la segunda ola de coronavirus que recorre Europa.
"Cuando acabamos de alcanzar esta semana el registro oficial de 1 millón de contagios, los estudios de prevalencia que han hecho las instituciones públicas, con expertos científicos a la cabeza indican que el número real de personas que han estado infectadas en nuestro país por Covid-19 supera ya los 3 millones de compatriotas", señaló.
Sánchez admitió que "las próximas semanas y meses, ahora que entramos en el invierno, serán duros".
Sin embargo, insistió en que "la situación no es comparable a la del 14 de marzo, cuando nos vimos obligados a decretar un confinamiento domiciliario general. Lo que queremos es evitar eso", informó la agencia de noticias DPA.
Sánchez también explicó el sistema de "semáforo" que definirá la situación de cada territorio y las medidas se tomarán en cada uno de los cuatro niveles contemplados.
"Unos niveles por debajo de 25 casos por 100.000 habitantes se considera de riesgo bajo, por encima de 25 se estima de riesgo medio. Una incidencia de 150 casos se considera de riesgo alto y si la incidencia supera los 250 casos por cada 100.000 habitantes se considera de riesgo extremo", dijo.
Más temprano, la región de Madrid anunció que a partir del sábado entrarán en vigor nuevas medidas para frenar la expansión del coronavirus, incluyendo la prohibición de reuniones entre la medianoche y las 6 de personas que no vivan bajo el mismo techo, mientras varias regiones españolas buscan imponer toques de queda.
Con su decisión, la Comunidad Autónoma de Madrid busca imponer "restricciones drásticas de la activad social, especialmente la nocturna", informó en ruedas de prensa el responsable madrileño de Salud, Enrique Ruiz Escudero.
Los bares y restaurantes tendrán que cerrar a la medianoche y no podrán aceptar clientes después de las 23, dijo Escudero, informó la agencia de noticias AFP.
Las autoridades habían explicado en días anteriores que un porcentaje importante de los contagios se estaban produciendo en reuniones y entre jóvenes.
El anuncio se produce a pocas horas de la expiración de un estado de alarma decretado hace dos semanas por el Gobierno central para imponer un cierre perimetral de la capital española y zonas aledañas.
En paralelo, la norteña región de Castilla y León anunció que impondrá un toque de queda para sus habitantes a partir del fin de semana, mientras que la región oriental de Valencia lo hará en los próximos días.
El ministro de Salud español, Salvador Illa, indicó en rueda de prensa que el Gobierno sigue estudiando las "opciones jurídicas" para facilitar los toques de queda en cualquier lugar del país, pero que en principio requeriría un estado de alarma para dar encaje legal a las restricciones a la movilidad.
En España, uno de los países más golpeados por la pandemia de la Covid-19, con más de 1 millón de casos confirmados y más de 34.500 fallecidos, las regiones autónomas son las responsables de tomar decisiones en materia de salud.