Enrique Alcoba, responsable de Abriendo Surcos, dialogó con Micrófono Abierto acerca de los ritos de Vicente Ferrer que se hacían en las zonas de campo para llamar a la lluvia.
Alcoba relató que un miembro del grupo les contó acerca de los rituales que se hacían para pedir agua y por esta razón realizaron una serie de entrevistas para ahondar en el tema, cuya tradición se ha transmitido oralmente.
De acuerdo a la información obtenida a Vicente Ferrer le gustaba que le bailaran, “el ritual terminaba con música, baile y plegarias”.
En estos eventos realizados en la región, la imagen de Vicente Ferrer se exponía, se sacaba en procesión y terminaban en la casa de la familia con la imagen afuera, mientras la gente bailaba, cantaba y emitían plegarias. Según los relatos, las celebraciones siempre finalizaban con una pequeña llovizna que otorgaba el santo.
“Esta mirada ancestral nos llevó a investigar y generar una propuesta en la danza relacionada con el santo”.
San Vicente Ferrer es patrono de Valencia y está asociado a que hizo brotar un surgente que se había secado y ayudó al mejoramiento de la comunidad Valenciana, actualmente el surgente sigue brotando en el lugar por donde pasó Vicente Ferrer.
Los valencianos que emigraron de sus tierras y llegaron a esta zona y la de Cuyo trajeron esta tradición, por ello se habla de San Vicente Ferrer del “santo cuequero” porque le gusta que le bailen.
Enrique Alcoba comentó que el cuadro artístico de baile que preparó la agrupación se denominó “Encanto para hacer que llueva” y luego de la presentación de esta obra, Río Cuarto se inundó y no podían salir del teatro.
Alcoba comentó que cuando fueron a Francia a presentar este cuadro transitaron los distintos lugares con días nublados.