"Existe en la isla de la que soy natural, Tenerife, un pequeño rincón muy transitado, pero el cual, sin embargo, parece que nadie se para a observar. Lo conocía desde hace mucho tiempo, pero nunca había encontrado el momento oportuno para fotografiarlo", explica Juan Luis Trujillo, autor de la instantánea."Aparentemente no está cuidado por nadie, al menos nunca he visto a un jardinero trabajándolo; y otra cosa que me hace pensar que la mano del hombre no está detrás de este verde recodo es que a tan solo uno o dos kilómetros de distancia se encuentra un barranco muy similar invadido por la misma planta: una especie de trepadora muy frondosa y que suele ser frecuente en la zona norte de la la isla."
National Geographic