“Nos sentimos un poco más desmotivados que al principio porque no hubo grandes avances. Estamos esperando la reunión del 3 de agosto, aunque sabemos que es imposible retomar el deporte regional si no lo hacen los torneos superiores”, expresó.
Y agregó: “Creo que no sería un inconveniente jugar en verano. Pero a nivel general hay una gran preocupación por no saber si este año habrá actividad. No solo por extrañar el fútbol sino porque hay muchos jugadores que no saben si deberán buscar otro trabajo o seguir esperando”.
Respecto de las consecuencias que puede tener esta situación en el mercado de pases de la Liga, el jugador explicó: “Yo creo que sufrirá cambios. Si este año se hace un torneo chico habrá menos dinero para los planteles, y eso hará que se apueste a jugar con gente del club. Por lo menos hasta que se acomoden las cosas”.