El Papa hizo referencia a la variedad y a la diversidad entre los fieles, que enriquecen la vida de la institución católica
"La uniformidad mata la vida de la Iglesia, que es variedad", sentenció ayer el papa Francisco, que al explicar el ser"católico" de la Iglesia, lo comparó con una "gran orquesta en la que hay variedad".
"Pensemos en la imagen de la sinfonía, que quiere decir acuerdo, armonía, diversos instrumentos que tocan juntos; cada uno mantiene su timbre inconfundible y sus características de sonido se acuerdan en algo común", dijo el Papa ante unos 60.000 fieles, durante una audiencia general marcada por la impresionante cantidad de paraguas que los fieles llevaron para protegerse de una intensa lluvia otoñal.
"Luego está quien guía, el director, y en la sinfonía que es ejecutada todos tocan juntos en armonía. Pero no es cancelado el timbre de cada instrumento. Es más, la peculiaridad de cada uno es valorizada al máximo", agregó.
Al aludir a esa imagen, el Pontífice destacó: "No somos todos iguales y no debemos ser todos iguales. Todos somos diferentes, cada uno con sus propias cualidades y esto es lo lindo de la Iglesia: cada uno aporta lo suyo y lo que Dios le dio para enriquecer a los demás. Y entre los componentes hay esta diversidad, que es una diversidad que no entra en conflicto, no se contrapone".
Entonces, como en otras oportunidades, el Papa advirtió de los chimentos y habladurías internas y litigios que muchas veces dividen a la Iglesia. "Nos tenemos que preguntar: ¿en nuestras comunidades vivimos en armonía o nos peleamos entre nosotros? En mi comunidad parroquial, en mi movimiento, ¿hay chimentos? Si hay chimentos, no hay armonía, sino lucha. Y ésta no es la Iglesia", clamó. "¡La Iglesia es la armonía de todos! ¡Nunca hablar mal el uno del otro, nunca pelear!", pidió, al llamar luego a que uno acepte al otro, aunque sea diferente y piense distinto. "Pero en la misma fe se puede pensar distinto", subrayó el Papa, en una frase que pareció dirigida a las críticas de diversos sectores de la Iglesia ante su forma de ejercer el papado.
Al principio de la catequesis, Francisco explicó que la Iglesia es católica porque es la casa en la que la fe es anunciada a todos. "Para dar un ejemplo, podemos decir que es como en la vida de familia."
También dijo que la Iglesia es católica porque es universal y está desparramada en todos los rincones del mundo. "La Iglesia no es un grupo de elite, no tiene que ver sólo con algunos", dijo Francisco, y despertó aplausos.
En otro orden y en el marco de las reformas para volver más transparente las finanzas del Vaticano, ayer entró en vigor una ley en el pequeño Estado aprobada por Francisco sobre las funciones de la Autoridad de Información Financiera (AIF). La "ley XVIII" tiene en cuenta observaciones del Gatt y de Moneyval.