Un documento judicial divulgó el nombre de un funcionario de Arabia Saudita que está señalado por su presunta ayuda a los terroristas de Al Qaeda.
La identidad de un funcionario de Arabia Saudita sospechoso de apoyar a los terroristas de Al-Qaeda responsables de los atentados del 11 de septiembre fue revelada en un documento judicial enviado por el FBI, lo que aviva los reclamos de los familiares de las víctimas que buscan investigar la responsabilidad de la monarquía sunita.
El archivo, presentado en abril y hecho público en los últimos días, censura en cinco oportunidades el nombre de Mussaed Ahmed al-Jarrah, quien trabajaba en la embajada de Arabia Saudita en Washington DC cuando ocurrieron los ataques terroristas del 2001, pero en un aparente descuido no fue tachado en una sexta mención. Cuando el hecho, notado por Yahoo News, fue consultado a las autoridades, el Departamento de Justicia notificó a la corte para retirar el documento.
Recién en la última década se confirmó que Estados Unidos investigaba un posible vínculo o complicidad de Arabia Saudita en el ataque. En ese marco, se trabajaba sobre el rol de dos sujetos: Fahad al-Thumairy, un clérigo radical y funcionario saudita que trabajaba en Los Ángeles; y Omar al-Bayoumi, un presunto agente que dio asistencia a dos terroristas de Al Qaeda, al darles alojamiento y dinero un año antes del operativo, también en Los Ángeles. Si bien Riad siempre ha negado cualquier vínculo con el ataque, un documento del FBI señala que ambos personajes tenían la orden de asistirlos, así como una tercera persona cuya identidad era desconocida, hasta ahora.
Por ello, los abogados de los familiares de las víctimas, que reclaman investigar la supuesta complicidad saudita, se referían al sujeto como “el tercer hombre”. Ellos sí conocían su identidad, tras elevar el pedido a Donald Trump el último 11 de septiembre, pero la información les fue revelada por la vía judicial y bajo estricta condición de confidencialidad, lo que no permitía presionar públicamente por la pista. “Esta es una gigante metida de pata. Demuestra que hubo un gran encubrimiento del rol de los sauditas”, consideró Brett Eagleson, vocero de las familias, en declaraciones a Yahoo.
Poco se sabe de las funciones de Al-Jarrah. Según fuentes diplomáticas consultadas por el portal, reportaba al embajador saudita y se dedicaba a la supervisión de actividades del Ministerio de Asuntos Islámicos en las mezquitas y centros islámicos apoyados por Arabia. Luego fue trasladado a las misiones diplomáticas en Malasia y Marruecos.
Sin embargo, se desconoce qué evidencias maneja el FBI sobre el accionar del ex funcionario y qué tan sólidas son. El documento en cuestión señala que la sospecha de que Al-Jarrah “encargó” a los otros dos sujetos que asistan a los terroristas es una teoría en desarrollo y no una conclusión definitiva.
No obstante, una declaración de una ex agente del FBI señala que la agencia sospechaba que Al-Jarrah estaba “apoyando” y “manteniendo” a estas personas durante la investigación.
Arabia Saudita, socio de EE.UU e importante aliado de Washington en Medio Oriente, ha negado sistemáticamente toda participación oficial en los ataques contra el World Trade Center de la ciudad de Nueva York y el Pentágono, que dejaron casi 3 mil muertos.