YPF, la mayor compañía petrolera argentina, logró revertir las pérdidas durante el primer trimestre del año. Ganó $ 6.350 millones contra un rojo que había sido de $ 8.180 millones. Pero esto fue en los primeros meses del año, con solo 10 días de cuarentena. A partir del 20 de marzo, cuando el país entró en cuarentena, las ventas de la petrolera se derrumbaron, junto con las del resto de la industrial.

La caída de cerca de 70% en la venta de combustibles hizo que la empresa decidiera recortar los salarios. La quita no será pareja: habrá bajas de 10, 15 y 20% y comenzarán a regir a partir del salario de mayo, que se pagará en junio. Es una de las primeras medidas que se conocen desde el nombramiento del nuevo CEO, Sergio Affronti. YPF emplea a 20.000 trabajadores. Sin embargo, el recorte podría alcanzar solo a los trabajadores fuera de convenio.

Según le indicaron fuentes de la compañía a la agencia Reuters, "la rebaja será por varios meses hasta que los efectos del coronavirus en la economía empiecen a disminuir. La venta de combustibles explica cerca del 60% de la caja de la petrolera.

Desde el SUPEH que comanda Antonio Cassia salieron a aclarar que los descuentos son solamente para los "no convencionados", sin embargo le enviaron una carta al presidente de la empresa, Guillermo Nielsen y a Affronti en la que rechazan todo tipo de descuentos y aseguran que el Estado Nacional, provincias y grandes consumidores le deben a la empresa fondos con los que podría hacer frente a sus compromisos.

La venta de nafta había bajado más durante las primeras semanas de cuarentena, pero fue repuntando a medida que se incorporaron más actividades permitidas.

Hasta ahora había habido rebajas salariales pero en las empresas que proveen servicios a YPF en los yacimientos, no en el staff de la petrolera. Y en el mercado esperan que otras compañías sigan el camino de la firma de mayoría estatal.

Es que, además de la baja del consumo, la actividad productiva está prácticamente paralizada. En abril, no hubo ninguna fractura en Vaca Muerta, según la secretaría de Energía, lo que no había sucedido nunca desde la puesta en marcha del megayacimiento.

Ahora, las productoras esperan el decreto del Poder Ejecutivo sobre el barril de petróleo “criollo” que contendrá un artículo donde se establece que no habrá aumentos de impuestos a los combustibles. La suba de tributos se dará el 1° de octubre. En algunas empresas y el Gobierno entienden que los precios de venta al público también estarán congelados hasta esa fecha.

Números del primer trimestre

YPF facturó $ 174.700 millones durante el primer trimestre, un alza de 33,4% comparado con el mismo período del año pasado. "Hay que aclarar que estas variaciones recibieron el impacto del aislamiento obligatorio implementado por el Gobierno a mediados de marzo para prevenir la expansión del coronavirus", sostiene la firma en su informe.

La producción de hidrocarburos subió 4,9%, aunque la de petróleo declinó 0,6% y la de gas subió 10%, motorizada por la demanda de las plantas eléctricas, las distribuidoras y exportaciones.