Mas allá de que hoy por hoy todas las miradas están puestas en la incertidumbre que genera la paralización del deporte en general, siempre es oportuno  poder hablar sobre este aspecto, y también de otros, con el  entrenador referente del básquetbol argentino Rubén Magnago,  con quien aflora  el recordado e inigualable título olímpico con la Generación Dorada.

Señaló que en estos tiempos el deportista debe adaptarse a nuevos modos de vida que seguramente implicarán un gran desafío mental y físico para estar a disposición cuando vuelvan las actividades.

Al evaluar la manera en que se generó ese histórico grupo de jugadores que tocó el cielo con las manos en Grecia, Magnano destacó: "Fue fundamental porque se pudo convocar a hombres que jugaban en Europa y luego recalaron en la NBA, sin dejar de lado la base necesaria de la Liga Nacional y el perfeccionamiento permanente de los entrenadores, todos esos aspectos tomaron un gran valor a la hora de analizar los logros".

Recordó que el mundial de Indianápolis del 2002 fue clave para consolidar una  selección sin puntos débiles, que tuvo la capacidad y grandeza de sobrellevar un torneo a pesar de la lesión de Ginóbili. Consideró que el referente del básquetbol argentino a nivel selección es Luis Scola y desde el punta de vista de logros en general,  y por su enorme trayectoria en la NBA, es  Manu Ginóbili.

Respecto del gran torneo que hizo Argentina en el último mundial de China donde se quedó con el subcampeonato, Magnano indicó: " Veo similitudes con el modo en que se seleccionaron los jugadores y confío en que Luis Scola pueda estar en los Juegos Olímpicos del 2021 sin mayores inconvenientes y con muy buena preparación".

Al analizar la actualidad del baloncesto cordobés y compararlo con las épocas doradas de Atenas, Rubén Magnano sostuvo: " Son procesos que pasan los clubes con sus momentos de transición y que en el caso de Atenas  se hizo largo en comparación con la vara alta  y el paladar negro que siempre tuvo, hoy se está dando prioridad a los jóvenes y es injusto exigirles resultados como si fueran las épocas doradas".

En el final, Magnano recordó a León Najnudel como el gran gestor del básquetbol en la República Argentina.