LA PLATA.- El caso del chico de seis años que tendrá un nuevo DNI femenino tras un trámite administrativo para reflejar el género con que, según su madre, se identifica es el más llamativo y reciente entre casi un millar de cambios de identificación sexual que han tenido lugar en la provincia de Buenos Aires sin necesidad de intervención de la Justicia, a partir de la sanción, el año pasado, de la ley nacional de derecho a la identidad de género.

Aunque el caso de la ahora niña es "el primero en el mundo de reconocimiento [de la identidad autopercibida] a tan temprana edad" (según el diputado provincial Guido Lorenzino), dista mucho de ser el único pedido de cambio de género en los documentos de identidad. Según fuentes de la Jefatura de Gabinete bonaerense, la provincia ya dio curso a más de 900 trámites de este tipo desde que está vigente la ley, entre ellos cinco correspondientes a adolescentes de 16 y 17 años.

El procedimiento es gratuito y consiste en la emisión de una nueva partida de nacimiento con el género elegido por el solicitante y también con un nuevo nombre de pila, en caso de que la persona elija un nombre diferente acorde con su nuevo género. Aunque no trascendió su nombre real, la niña que obtuvo su nuevo DNI fue identificada como Luana, y atrás quedó el nombre de varón con que había sido registrada al nacer. Una vez obtenida la partida modificada, se tramita el nuevo DNI, que conserva el mismo número que el confeccionado originalmente.

Por imperio de la ley nacional 26.743, de derecho a la identidad de género, vigente desde junio del año pasado, el estado bonaerense está habilitado para realizar el cambio de documentación personal mediante un simple acto administrativo, sin que haga falta la intervención de un juez.

Para acceder a ese trámite, que se puede realizar en la delegación del Registro Provincial de las Personas más cercana al domicilio o en la que inscribió el nacimiento, no hace falta haberse realizado una intervención quirúrgica de cambio de genitales ni haberse sometido a tratamientos hormonales, médicos o psicológicos relacionados; ni tampoco utilizar vestimenta asociada con un género determinado. El principal requisito es llenar un formulario que se puede descargar de Internet y que tiene el carácter de declaración jurada, en el que se hace constar el deseo de proceder a la "rectificación registral" de la identidad.

Si el solicitante es menor (como Luana y los cinco adolescentes que ya pidieron el cambio de documentos), el formulario debe ser rellenado por sus padres o representantes legales, y el niño debe contar con la asistencia de un abogado y dar su conformidad expresa.

Pero, incluso si alguno de los responsables legales del niño se opone a la concreción del trámite, existe la posibilidad de un recurso judicial sumarísimo para que un juez decida si se debe autorizar el cambio documental.

Luana nació varón, pero antes de cumplir los dos años, según declaró Gabriela, su madre, ya se identificaba como una niña. Ahora tiene seis y ya se inició el trámite para reflejar esa identidad autopercibida en su partida de nacimiento y su DNI. Pero no fue fácil: en la búsqueda de ese reconocimiento, su madre se topó con la negativa de un tribunal, convencido de que Luana era muy chica para disponer del discernimiento necesario.

Pero la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia emitió un dictamen favorable y habilitó la realización del trámite.

César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), organización que asesoró y acompañó a la madre de Luana, señaló a la prensa que es la primera vez en el mundo que una pequeña de tan corta edad logra la rectificación registral por ley, sin necesidad de recurrir a la Justicia.

"La provincia de Buenos Aires es pionera en la inclusión de nuevos derechos a su ciudadanía. Es la provincia que más matrimonios igualitarios tiene, que más reconocimientos de hijos de parejas homosexuales tiene, [y] también ha sido pionera en la posibilidad de poner el primer apellido de la madre en una pareja heterosexual", se jactó el jefe del gabinete bonaerense, Alberto Pérez, quien fue el encargado de anunciar que el gobierno provincial procedería a rectificar los documentos de Luana.

MÁS FÁCIL QUE CAMBIAR DE AUTOMÓVIL

Pocos requisitos
Para pedir la rectificación del DNI no es necesaria una intervención quirúrgica de cambio de genitales, ni someterse a tratamientos médicos, psicológicos u hormonales. Sólo se debe llenar un formulario por Internet

Cuando son menores
Si el solicitante tiene menos de 18 años, el formulario debe ser completado por sus padres o representantes legales, y el menor debe dar su consentimiento

Si los padres no se ponen de acuerdo
En el caso de menores, puede intervenir un juez, que mediante un recurso judicial sumarísimo decidirá si se procede o no al cambio de documento de identidad.

Fuente: lanación.com