Telescopios europeos y de la NASA registran el gigantesco estallido de récord de un agujero negro. En el 'cráter' que ha dejado cabrían hasta 15 galaxias como nuestra Vía Láctea.
Las consecuencias de la explosión más potente vista en el universo, proveniente de un agujero negro, acaban de ser registradas por telescopios de la Agencia Espacial Europea (ESA) y de la Nasa.
La "gigantesca explosión" se produjo en el cúmulo de galaxias Ofiuco, a unos 390 millones de años luz de distancia, un conglomerado de miles de galaxias, gas caliente y materia oscura que están unidos por la gravedad.
La erupción, señala un comunicado de la ESA, está vinculada a "potentes chorros liberados por el agujero negro supermasivo" que se encuentra en el centro y que se alimenta del gas que le rodea, lo que hace estallar ocasionalmente grandes cantidades de materia y energía.
Las imágenes fueron tomadas por el telescopio XMM-Newton de la ESA y el Chandra de la Nasa, junto a dos radiotelescopios en la Tierra.
La erupción del agujero negro liberó una cantidad de energía unas cinco veces mayor que la del evento más poderoso de este tipo conocido hasta la fecha, observado en el cúmulo de galaxias MS0735.6+7421.
La autora principal del estudio, Simona Giarcintucci, del Laboratorio de Investigación Naval (EEUU), explicó que "esta explosión es similar a la forma en que la erupción del Monte Santa Helena (EEUU) en 1980 arrancó la cima de la montaña" y destruyó 500 kilómetros cuadrados de bosques.
La diferencia clave entre ambas es que "podrías meter 15 galaxias como la Vía Láctea" en el cráter que el estallido del agujero negro perforó en el gas caliente del cúmulo de Ofiuco, dijo la experta en un comunicado del telescopio Chandra.
La erupción del agujero negro debe haber terminado porque los investigadores no ven ahora evidencias de los chorros en los datos de radio, agrega la nota.