Según la Bolsa de Cereales de Córdoba, la cosecha 2019/20 tuvo un valor bruto de 932 millones de dólares, 100 millones más que la campaña anterior.
La Bolsa de Cereales de Córdoba difundió sus cálculos finales de producción de trigo en la provincia, entre los que se destaca la estimación de que el cereal generó un valor bruto de casi mil millones de dólares.
Según la entidad bursátil, la producción de la última campaña (2019/20) se ubicó en 4,64 millones de toneladas, la segunda cifra más alta en al menos la última década.
El récord corresponde al ciclo 2016/17, con cinco millones de toneladas. Lo obtenido en el último ciclo supera por un 32 por ciento las 3,5 millones de toneladas de 2018/19 y por un 68 por ciento el promedio 2007-2020.
“Las diferencias respecto a la campaña 2018/19 radican, principalmente, en una mayor área sembrada, una menor área perdida y en los rendimientos obtenidos que fueron un 16 por ciento mayores”, precisó la Bolsa.
En concreto, la siembra creció en casi 200 mil hectáreas (11 por ciento) hasta llegar a 1,63 millones de hectáreas, la mayor cifra de la historia. Los rendimientos pasaron de 25,9 quintales por hectárea a 30 quintales.
Cálculos económicos
El precio a cosecha con que terminó la campaña fue de 167 dólares por tonelada, por debajo de los casi 200 dólares del ciclo anterior, pero por encima de los cuatro ejercicios anteriores.
Así, “el aumento en el volumen producido, más que compenso la caída en el precio a cosecha, resultando en un incremento del 17 por ciento en el valor bruto de la producción respecto a la campaña previa”, precisó la Bolsa.
De forma precisa, el valor bruto se ubicó en un total de 932 millones de dólares, más de 100 millones por encima de 2018/19.
De ese total, a los productores les quedaron 775 millones de dólares, un 12 por ciento más.
En cuanto a la rentabilidad, estos altos rindes que logró el trigo compensarían los menores rendimientos esperados en soja de manera que, quien hizo un planteo de rotación del cereal con soja de segunda, estaría obteniendo un resultado económico favorable de 38,4 dólares por hectárea que significa una rentabilidad sobre el capital invertido del 6,9 por ciento.
Estos valores están por debajo del ciclo anterior, cuando el resultado fue de 58,1 dólares y la renta del 9,9 por ciento.