La brusca devaluación que se produjo tras los resultados electorales de las PASO rápidamente se trasladó a los precios, como suele suceder ante cada estampida del dólar en la Argentina. Y si bien el efecto pleno se sentirá este mes, la escalada inflacionaria de la segunda quincena de agosto modificó el escenario de desaceleración que se venía concretando desde abril y el Indice de Precios al Consumidor (IPC) volvió a dispararse.
Tras haber registrado un aumento de 2,2% en julio y haber sido la cifra más baja del año, la inflación de agosto ascendió a 4% respecto del mes anterior, lo que equivale a una suba interanual del 54,5%. A su vez, el acumulado de los primeros ocho meses del año asciende a 30%.
El rubro que tuvo el impacto más inmediato, y que se reflejó en los precios del mes pasado, fue el de alimentos y bebidas, que registró un alza del 4,5%. Atenuó esta suba, sin embargo, la medida adoptada por el Gobierno a los pocos días de la devaluación de quitar el IVA a 14 categorías de productos de la canasta básica.
De acuerdo con varias consultoras, este beneficio impositivo generó un impacto en los precios -en promedio bajaron 0,9%- y en la demanda, que creció en estos ítems en términos interanuales, frente al resto de los rubros que en agosto siguieron mostrando importantes caídas respecto del año pasado.
La categoría que más subió fue Equipamiento del Hogar, con 6,1%, seguida de la de Salud, que trepó 5,2%. A su vez, las bebidas alcohólicas y el tabaco subieron 4,4%; el transporte, 4%; recreación y cultura, 4,2%; restaurantes y hoteles, 3,6% y prendas de vestir y calzado, 3,1%. Los que menos subieron fueron los rubros de educación, con 2,5%; vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (2,1%); y comunicación (1,2%).
La inflación núcleo fue de 4,6%, en tanto que los precios de los regulados y de los productos estacionales ascendieron a 2,1% y 3,9%, respectivamente. A su vez, los precios de los bienes treparon 4,9% y los de los servicios, 2,3%, de acuerdo con el organismo estadístico.
Según señaló vía Twitter el rector de la Universidad Metropolitana (UMET), Nicolás Trotta, la inflación de agosto trepó al 4,3%, por lo que
la suba de precios acumulada desde diciembre ascendió al 30,5% y la interanual, a 55,1%. "La inflación de 2019 superará a la de 2018, que fue del 48%, y se convertirá en la más alta desde 1991", enfatizó el economista.
Por su parte, la consultora que dirige la ex funcionaria del Indec, Graciela Bevacqua, estimó una inflación para el mes pasado de 3,8% y una interanual del 55,7%. Según la firma, el rubro de alimentos y bebidas trepó 4,5%, mientras que equipamiento y mantenimiento del hogar y atención médica mostraron subas del 7,6% y 5,7%, respectivamente. "En lo que resta del año, el alza de los precios estará determinada principalmente por la dinámica que adquiera el dólar. Sin incrementos de tarifas, se espera que cierre cercano al 55%. Quedan pendientes para los próximos meses aumentos en prepagas, cigarrillos y servicio doméstico", precisa el informe de la consultora GB.
Para LCG, que dirige Guido Lorenzo, la cifra fue del 4,8%, y ya proyectan un piso de 6% para septiembre. "La depreciación del peso pegó no solo en los bienes transables, sino que también precautoriamente muchos rubros que no están relacionados con el comercio internacional decidieron elevar los precios. Actualmente, el dólar guía los precios y la sensación que se 'descontroló' es lo que produjo la suba desmesurada", afirmó Lorenzo.
Fuente: Infobae