Resulta difícil de creer, pero un ex Galáctico del Real Madrid está detenido por ser el presunto líder de una red de amaño de partidos. Se trata de Raúl Bravo, quien compartió vestuario con David Beckham, Luis Figo, Zinedine Zidane, Roberto Carlos y Ronaldo, entre otros, principal protagonista del operativo policial contra el arreglo de partidos en primera y segunda división.

Bravo, nacido en la localidad de Gandía (Valencia), se inició como lateral zurdo y llegó al primer equipo del Real Madrid en 2001, cuando el entrenador era Vicente del Bosque. No tenía mucho rodaje porque delante suyo estaba el brasileño Roberto Carlos, por lo que salió a préstamo al Leeds United de Inglaterra.

Pero cuando regresó al club blanco y se ganó un lugar en el estelar equipo que dirigía Carlos Queiroz, quien lo convirtió en defensa central para acompañar a Francisco Pavón o Iván Helguera. Bajo las órdenes de actual seleccionador de Colombia, en la temporada 2003/04, llegó a jugar 32 partidos ligueros y 10 en la Champions League.

Sus desempeños en el Real Madrid, donde ganó dos títulos de La Liga y una Champions League, le permitieron ser parte de la selección española que disputó la Eurocopa de 2004 en Portugal. En total, Bravo disputó 14 partidos en La Roja.

Pero su carrera empezó a diluirse poco a poco. Se fue en 2007 al Olympiacos (Grecia), y luego regresó a España para jugar en el Numancia y el Rayo. Pasó por el Beerschot (Bélgica), el Córdoba y el Veria y el Aris Salonica (Grecia), donde se retiró en 2017. A los 38 años ha sido arrestado como presunto cabecilla de una red de amaño de partidos en el fútbol español.

Bravo fue detenido junto a Borja Fernández, recién retirado tras jugar las dos últimas temporada en el Real Valladolid; Carlos Aranda, ex jugador de varios equipos de Primera División (Numancia, Villarreal y Sevilla, entre otros); e Íñigo López, actualmente en el Deportivo de La Coruña. Todo indica que no serán los únicos jugadores arrestados e imputados por pertenencia a organización criminal, corrupción entre particulares y blanqueo de capitales.

Fuente: Infobae