Esto en relación a la distancia existente entre el planeta y el Sol, así como, la temperatura en que el agua puede mantenerse en su estado líquido. 

Andrew Rushby, Astrobiólogo y responsable de la investigación, utiliza el término "zona habitable" para referirse a lo anterior.

El cataclismo que acabará con la vida en la Tierra, se deberá a que ésta saldrá de la zona habitable del Sol y entrará a la zona caliente del mismo, ocasionando que toda el agua se evapore. Para ese momento, el ser humano ya habría dejado de existir, ya que su constitución resentiría hasta el más mínimo cambio de temperatura. 

Sin embargo, asegura que, dado que el humano como tal sólo ha existido desde hace 200 mil años; aún falta mucho tiempo para que se de un desarrollo total de la vida inteligente.

Rushby menciona que el estudio es importante para medir la habitabilidad de otros planetas y abrir la posibilidad de que éstos pudieran albergar algún tipo de vida inteligente. Por otra parte, apunta que, si el ser humano se viera forzado a abandonar el planeta por su inhabitabilidad, Marte sería la opción ideal para que se estableciera.