Se elimina el ajuste diario de la zona de no intervención. El piso quedó en $ 39,75 y el techo en $51,45. Hasta ahora se ajustaba al 1,75% mensual. Buscan sacarle volatilidad al tipo de cambio.
Ante el mal número de inflación de marzo, y la previsible presión sobre el tipo cambiario que podría acentuarse a partir de este miércoles, el Banco Central decidió, en consenso con el Fondo Monetario, aplicar un retoque al esquema cambiario: dejará fijo el actual nivel del techo y piso de las bandas cambiarias (o zona de no intervención).
Desde este martes y hasta fin de año, el techo de la banda queda en $ 51,45 y el piso en $ 39,75. Se quedaría en estos niveles hasta nuevo aviso.
Este martes el dólar mayorista cerró a 42,39 pesos, es decir que debería subir 21,6% para tocar el techo de la banda cambiaria. El titular del BCRA, Guido Sandleris, anunció además que, para no inyectar más pesos al mercado, el organismo monetario no comprará divisas si el tipo de cambio perfora el piso de la zona de no intervención, hasta el 30 de junio.
Hasta ahora, el piso y techo de la banda venían indexándose a un ritmo del 3% en el arranque del programa monetario (octubre de 2018), hasta diciembre de 2018. En enero, el ajuste mensual fue del 2%, y desde abril ese ajuste se redujo al 1,75% mensual.
Esta modificación, dada el previsible recorrido ascendente del dólar, anticiparía la intervención del Banco Central en caso de que el precio del dólar perfore el techo de la zona de no intervención.
En ese caso, el Central tiene autorización para vender hasta 150 millones de dólar por día, para evitar una escapada del tipo de cambio.
La amplitud de la zona de no intervención fue criticada justamente porque permite una variación de precios muy importante antes de que el Central pueda intervenir. De hecho, lo que está generando ansiedad en el mercado es la volatilidad del tipo de cambio. Cuando arrancó el programa monetario el dólar estaba cerca de $ 42, llegó a bajar hasta $ 37 a mediados de enero y se acercó a los $ 44 algunos días atrás.
Pero lo que pasó en las últimas ruedas es una muestra de esa volatilidad que a nadie le agrada. El dólar bajó 4% la semana pasada y casi 1,5% el lunes. Pero este martes subió casi 2% y tras el anuncio del IPC de marzo seguía subiendo en el mercado del tipo de dólar que se fija mediante la compra y venta de bonos.
Pero el temor es qué pasará con el dólar conforme avance el calendario electoral y se acerque la fecha de las presidenciales.