Es una decisión clave para el Gobierno de Macri, que necesita calma en los mercados globales para evitar temblores a nivel local.
La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos decidió este miércoles mantener sin cambios los tasas de interés que regulan el costo del dinero, dentro de un rango de entre 2,25% y 2,5%, y en el corto plazo no prevé llevar adelante nuevos incrementos -como sucedió en 2018- debido a que las perspectivas de crecimiento económico se debilitaron en los últimos meses.
La noticia trajo alivio a los mercados financieros de todo el mundo, porque una suba de tasas de interés en EE.UU. obliga a recomponer los portafolios de inversión, afectando sobre todo a los de mayor riesgo.
Por eso para la Argentina -país vulnerable en lo financiero si los hay- la noticia fue muy bien recibida. De hecho, el dólar atenuó su trepada, los bonos que apuntaban hacia abajo se recuperaron y lo mismo hicieron las acciones.
Los funcionarios argentinos también mostraron alivio por la noticia. La marcha del programa económico y sobre todo monetario requiere extrema calma global, porque una pequeña vibración en el mundo aquí se puede sentir como un terremoto.
"El crecimiento económico se ha ralentizado de su sólida tasa registrada en el último trimestre del pasado año", sostuvo la FED en un comunicado emitido al término de su reunión de política monetaria de dos días.
En concreto, el Banco Central de Estados Unidos rebajó las perspectivas de crecimiento al 2,1% para el corriente año, frente al 2,3% proyectado en diciembre pasado.
En ese marco, el presidente del organismo, Jerome Powell, reconoció "puede que pase un tiempo antes de que necesitemos ajustar la política monetaria", dijo Powell en una conferencia de prensa, tras el comunicado dado a conocer con la decisión tomada por el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC).
Según los especialistas, las palabras de Powell podrían significar que la FED no volverá a ajustar la tasa de interés en los que resta de 2019, un escenario distintos al de tres meses atrás.
La FED, en su comunicado de prensa, insistió en que el panorama económico aconseja continuar con el enfoque "paciente" a la hora de continuar con el gradual plan de suba del precio del dinero, señaló la agencia EFE.
La economía estadounidense se mantiene sólida, con una tasa de desempleo en febrero del 3,8%.
No obstante, en febrero se registró la menor cantidad de puestos de trabajo nuevos de los últimos 17 meses, con un total de 20.000, lo que expertos consideraron como la última señal de una desaceleración más amplia de la economía del país.
De hecho, el primer cálculo de crecimiento económico de Estados Unidos en 2018 fue del 2,9 %, el mayor ritmo desde 2015.