La entidad desdobló la licitación de Leliq en dos. La tasa promedio llegó a 56,76% y el riesgo país bajó: quedó en 767 puntos.
Tras tocar los $ 43,41, su máximo valor desde septiembre, el dólar cerró el último día de la semana con una baja de 1,30 pesos, a $ 42,26 en el Banco Nación.
En el mercado mayorista, que es donde operan bancos y empresas, retrocedió 1,15 pesos, a $ 41,20, es decir 3,1%.
El jueves, con apenas US$ 7 millones, la divisa se había disparado en los últimos minutos de la rueda, y este viernes desanduvo el camino de esas pocas operaciones. En Brasil, el dólar también bajó unos centavos.
El jueves, la suba fuerte se había concretado luego de la licitación de Letras de Liquidez (Leliq), porque la tasa no subió como el mercado esperaba. Por eso, todos miraban qué iba a hacer el Banco Central este viernes.
El alza de tasas busca tentar a los inversores para que se mantengan en pesos y no se vayan al dólar. Y, además, "seca" la plaza, con lo que ya no hay pesos para comprar. El riesgo país, por su parte, bajó y terminó en 767 puntos básicos.
En los dos últimos días, el Central redujo 8% la base monetaria (unos $ 85.000 millones) con las absorciones y la tasa pasó de 50,21 % a 51,86% el jueves. Pero no alcanzó.
Por eso, este viernes la tasa volvió a subir y el Central estrenó una nueva estrategia. Decidió desdoblar en dos la licitación diaria de Leliq, "con el objetivo de mejorar la señal de política monetaria y calibrar con más precisión la liquidez del sistema".
En la primera licitación, a las 11.30, adjudicó $ 104.865 millones, a una tasa promedio de 56,76%, un salto de 5 puntos porcentuales. La tasa máxima llegó a 59,89 y la mínima fue de 52%.
A las 14.15, adjudicó otros $ 101,326 millones, a una tasa promedio de 59,06%, una máxima de 60,4911% y mínima de 52,51%.
Así, la tasa promedio total del día fue 57,894% y el monto total adjudicado fue de $ 206.192 millones, una contracción de $ 19.000 millones.
La tasa es la herramienta que está usando el organismo porque está atado de manos para intervenir en el mercado de contado, que es el que marca el valor del dólar. Mientras la divisa permanezca dentro de la banda de no intervención cambiaria, que es de entre $ 38,81 y $ 50,23, la entidad monetaria no puede salir a vender para bajar el precio. Fue un acuerdo firmado con el FMI.