Las primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) dejaron un escenario polarizado en la disputa por el distrito electoral más importante del país: la provincia de Buenos Aires. Pese a que los pronósticos anticipaban una definición más ajustada, el Frente Renovador resultó entonces la fuerza más votada, con una ventaja sobre el Frente para la Victoria de más de cinco puntos porcentuales.
Como era de prever, el apoyo a Sergio Massa creció luego de su triunfo. Según la encuesta que realizó la Universidad Nacional de La Matanza, esa diferencia con su rival más inmediato es hoy de 13,8%. Se trata del primer trabajo de una serie que publicará Infobae durante los meses de septiembre y octubre, y es producto de un acuerdo entre el Programa de Estudios de Opinión Pública de esa casa de altos estudios y este medio.
De acuerdo con la encuesta, el intendente de Tigre registra hoy una intención de voto de 44,5%, casi diez puntos más que lo alcanzado el 11 de agosto. Por el contrario, en lo que respecta a Martín Insaurralde la situación varió poco: el 30,7% representa un crecimiento apenas superior a un punto.
El Frente Progresista Cívico y Social, que encabeza Margarita Stolbizer y del que también participa la UCR, mantiene el tercer puesto con una intención de voto de 12,8%, lo que significa una suba leve (1,64) en comparación con las primarias. En cambio, la lista que lidera Francisco de Narváez sufrió un marcado retroceso: pasó de 10,51% a 5,3%. La nómina de competidores la cierran el representante de la izquierda Néstor Pitrola con 3,6%, y el líder de Unión con Fe, Gerónimo Venegas, con 2,1%.
El incremento que se observa en la lista que encabeza Massa obedece en parte a que "las expresiones menores antikirchneristas que no alcanzaron el piso para participar de la elección general migraron casi en su totalidad a la candidatura de Massa", explicó el responsable de ese centro de estudios, Raúl Aragón.
El analista remarcó también como un elemento para interpretar ese fenómeno la "dramática caída" de De Narváez. Según apuntó, la gran mayoría de esos votantes se han volcado por el Frente Renovador.
"Creo que el desempeño tan significativo de Massa convocó una especie de voto útil", observó Aragón. "Se convirtió en la figura de oposición", añadió.
El atractivo de los candidatos
Para el estudio, la UNLaM consultó a 1.700 bonaerenses a través de encuestas telefónicas. A partir de su respuesta en cuanto a la intención de voto, se indagó al electorado sobre los motivos por los que se hacía esa elección, de manera de comprender mejor qué factores se apreciaban de los aspirantes.
Las respuestas a ese interrogante evidenciaron la íntima relación que ve el votante del Frente para la Victoria con la gestión del Gobierno. Casi la mitad de quienes optarán el 27 de octubre por Insaurralde destacan su apoyo a la presidente Cristina Kirchner.
En el caso de Massa, lo que privilegia la mayoría (30,2%) de sus simpatizantes es su calidad personal. En tanto, el 27% destaca su capacidad de gestión.
También los seguidores de De Narváez subrayan su calidad personal, mientras que en Stolbizer prima la honestidad. De Pitrola se recalca la ideología y de Venegas, su vocación de cambio.
La encuesta del Programa de Estudios que coordina Aragón relevó además el comportamiento del electorado en función de la decisión que tuvo en las elecciones presidenciales de 2011. Se observa en ese punto que menos de la mitad (47,3%) de los votantes que logró Cristina Kirchner optarán por el intendente de Lomas de Zamora, y, en cambio, un 33,4% se inclinará por su principal rival.
Massa se queda también con siete de cada diez electores de Eduardo Duhalde, y cosecha un importante porcentaje de adhesiones de quienes eligieron a Elisa Carrió, a Alberto Rodríguez Saa y a Hermes Binner.
El Frente Progresista Cívico y Social es más fuerte entre quienes en 2011 apoyaron a Ricardo Alfonsín (hoy segundo candidato en esa lista) y al FAP de Binner.
Perspectivas
Superadas las PASO, las distintas fuerzas ajustaron sus estrategias, algunas de ellas con cambios significativos. Sin embargo, para Aragón es poco probable que el escenario se modifique. "Yo pienso que el resultado de las elecciones está más o menos definido", indicó.
El anuncio del Gobierno para elevar el piso de pago del Impuesto a las Ganancias fue inmediatamente interpretado como un gesto en tiempos electorales. De todos modos, según el analista "es muy difícil" que pueda contentar a la clase media, principal beneficiaria de la medida. "Ese sector está muy enojado con el kirchnerismo", explicó. "Lo que tiene algún impacto es el cambio de discurso de Insaurralde, que está hablando de inflación, de inseguridad...es decir, empieza a mostrarse como un kirchnerista que escucha", agregó.
Aragón minimizó la posibilidad de que De Narváez pueda resurgir con algún golpe de efecto, del mismo modo que Massa pueda perder un importante caudal de votos. "Siempre existe la posibilidad de la aparición de un cisne negro, de una variable que no está en los cálculos, pero no me imagino cuál podría ser ese factor", insistió.
La carrera por 2015
Durante la campaña previa a las primarias y luego, varias fuerzas cruzaron acusaciones respecto a supuestas interferencias de las aspiraciones presidenciales de algunos dirigentes en el camino a las legislativas. En efecto, precandidatos confesos para las elecciones de 2015 como Daniel Scioli y Mauricio Macri se involucraron en las actividades de las fuerzas que integran.
La medición de la UNLaM indagó al respecto con la pregunta: "Si las elecciones presidenciales fuesen este domingo y los candidatos fuesen estos, ¿por quién votaría?". En base a la lista entregada, el resultado fue contundente y mostró una disputa entre dos presidenciables: el gobernador bonaerense alcanza 28,3%, mientras que Massa obtiene 21,1%.
En otra escala aparece el jefe de Gobierno porteño, con 8,9%; más atrás Binner (6,1%) y empatados en el quinto lugar Elisa Carrió y Julio Cobos, con 4,4%.
"No se elige con la misma lógica", explicó Aragón al analizar las cifras, que muestran al partido de Gobierno al tope de las preferencias. "Si bien demostró capacidad de gestión en Tigre y Anses, Massa no ha mostrado estatura presidencial. Scioli, en cambio, gobierna la Provincia y su aspiración es algo que está muy instalado", añadió.
Consultado sobre qué motivos llevarían al electorado a respaldar la figura del mandatario provincial pese a estar en desacuerdo con el kirchnerismo, dijo: "Creo que hay una comprensión en el público de que Scioli no tiene otra alternativa táctica transitoria que acompañar al oficialismo en esta etapa".
"Ayudó a instalar esa comprensión todo lo que el oficialismo nacional hizo en el período previo, que le impidieron endeudarse, le negaron fondos. Eso terminó por instalar la noción cierta de que si Scioli no acompaña no podría gobernar y por eso no se le traslada la descalificación", precisó.
Fuente: Infobae.com.ar