Y sin embargo, había algo que se les atragantaba: los ojos. Las operaciones oftalmológicas son algo muy delicado. No es raro que encontrar residentes de oftalmología que dejan la especialidad porque no tienen la finezza y la habilidad que exige la disciplina. Los robots no parecían estar a la altura, pero en 2016 la Universidad de Oxford se propuso cambiar eso.
Dos años persiguiendo el éxito clínico
En el Área de Neurociencia Clínica del Departamento Nuffield de la Universidad iniciaron un ensayo clínico para evaluar la efectividad de PRECEYES, un sistema quirúrgico robótico diseñado específicamente para realizar cirugía de retina. Y, según acaban de publicar, los resultados han sido muy prometedores.
Seleccionaron a 12 pacientes que necesitaban una operación casi rutinaria. Sometieron a seis de ellos a la operación tradicional con cirujanos y a otros seis a la operación asistida por robot. Hay diferencias sustanciales en el procedimiento (como el lugar donde se hacen las incisiones), pero las operaciones eran los suficientemente rutinarias como para permitirnos la comparación.
De hecho, las doce cirugías fueron un éxito. Y, según parece, los robots mejoraron la efectividad de los cirujanos. Esto hizo que iniciaran otro ensayo para disolver hemorragias en la retina. Las tres operaciones también fueron exitosas.
No todo eran buenas noticias: de media, los robots tardaban tres veces más de lo que se tardaba habitualmente. No obstante, esto es lo habitual. Las operaciones robóticas no tienen por qué ser más rápidas, pero son más seguras y permiten una recuperación más rápida. Además, el equipo espera reducir la duración conforme los cirujanos se adapten a la nueva tecnología.
La mirada del futuro
"Nuestro siguiente paso será usar el dispositivo quirúrgico robótico para la administración precisa y mínimamente traumática de una terapia génica en la retina. Será otro logro increíble y está previsto que comience a principios de 2019", explicaban desde el equipo.
Son este tipo de operaciones donde los robots pueden ser especialmente útiles porque los médicos no pueden acceder fácilmente y no tenemos metodologías fiables para identificar las zonas donde aplicar el tratamiento. En este ámbito, los robots no es que sean atractivos es que son imprescindibles.
Sin embargo, la llegada de los robots a las operaciones oculares abre la puerta también a una serie de cambios muy sustanciales en la calidad, la cantidad y el precio de la sanidad de los ojos. Los robots oftalmológicos nos permiten mirar al futuro con una mirada nueva.