Menos de 24 horas después que el
jefe de Policía manifestara que Río Cuarto “es una ciudad segura”, un delincuente ingresaba a un maxikiosco de Av. San Martín al 1600 y le aplicaba
ocho puñaladas al dueño del local en un intento de robo.
Según el comisario mayor Pedro Díaz, su afirmación sobre la seguridad de la localidad se basa en la cantidad de delitos que ocurren teniendo en cuenta el número de habitantes, los cuales estarían por debajo de lo habitual si se compara a Río Cuarto con otras ciudades de tamaño similar.
¿La inseguridad es una sensación colectiva o una realidad? ¿Qué dicen las estadísticas? Desde la Departamental Río Cuarto de la Policía de Córdoba plantearon que tienen registros de los delitos, pero solamente para uso interno. Por su parte, el Observatorio de Estudios sobre Convivencia y Seguridad Ciudadana de la Provincia aún no brindó precisiones al respecto. Ante la ausencia de información oficial,
LV16.com realizó un análisis tomando sólo los hechos delictivos que fueron notificados por las fuerzas de seguridad en el período enero – mayo y que luego se publicaron en esta página web (NdlR: En los datos no son contabilizadas los operativos y allanamientos vinculados al consumo/comercio de drogas, denuncias de oyentes, casos de violencia de género ni siniestros viales).
Robos a mano armada, arrebatos en pleno microcentro riocuartense, asaltos a colectiveros, engaños telefónicos e intentos de hurtos con inhibidores de alarmas son los que más se repiten. En el mes de mayo, se presentó un nuevo formato: los “rompe puertas”.
El uso de armas, una tendencia que crece
En los primeros cinco meses del año hubo
52 hechos delictivos donde se notificaron heridos y/o se detuvo a personas por el uso de armas, lo que da
un promedio de al menos 10 casos por mes.
De esos 52 casos, 32 fueron en intentos de robo, 7 por ajustes de cuentas, 9 continúan en etapa investigativa y 4 se produjeron por riñas. En el marco de estos acontecimientos,
cinco personas perdieron la vida, aunque a excepción de uno que aún se investiga, todos fueron asesinatos por cuestiones personales.
El aumento en el uso de armas fue algo de lo que también se percataron en la Departamental local. En el pasado mes de abril, el comisario Díaz sostuvo que
los jóvenes portan cada vez más armas blancas.
Si se hace foco en los delitos donde no hubo armas, la cifra asciende a 121 hechos, lo que reflejaría uno cada 30 horas entre enero-mayo. Contando la totalidad de los delitos -155 con y sin armas-, ocurre uno cada 23 horas en la ciudad.
El caso de los colectivos urbanos
Los robos a colectivos urbanos son una constante en este 2018. No por mero protocolo hubo reuniones entre directivos de la SAT, funcionarios del Municipio y la Policía para encontrar una solución. Además, hasta
los propios choferes realizaron un paro reclamando por más seguridad.
Ocho fueron los asaltos a colectiveros publicados por LV16.com desde enero a la fecha. En todos, el modus operandi era el mismo. Una persona se subía al rodado como un pasajero común y al momento de pagar, amenazaba al chofer con un arma blanca y le pedía la recaudación. Luego de obtener el dinero se daba a la fuga.
De esta situación surgió la intención de poner un policía de guardia en cada unidad luego de determinada hora del día. No obstante, el anhelo principal es eliminar totalmente el sistema de pago en efectivo e implementar el pago del boleto con tarjeta, algo en lo que ya se avanzó luego que el Concejo Deliberante aprobara la medida, la cual
iniciará gradualmente a partir de julio.
Inhibidores de alarmas y engaños telefónicos
Otro tipo de robo muy reiterado en el año fue el realizado mediante inhibidores de alarmas.
En 2018, siete casos fueron publicados por este medio. En uno de ellos,
estaba involucrado un expolicía de la ciudad.
Los engaños telefónicos son difíciles de detectar. Si bien hay intentos de estafar o robar a alguien casi todas las semanas, muchas veces la gente no hace la denuncia, aunque desde la Departamental de Policía realizaron una
charla informativa para alertar a los ciudadanos, sobre todo a personas mayores.
La tranquilidad, ¿cosa de otros tiempos?
Más allá de lo que marquen los números, la gente sabe que puede ser víctima de un robo a la vuelta de la esquina. El comisario Díaz recomendó tomar precauciones y extremar medidas de seguridad en todo momento, porque como bien aseguró hace tiempo, un “solo hecho delictivo genera inseguridad”.
Desde la Central de Monitoreo que tendrá el Edecom, pasando por el futuro Ente de Prevención Urbana y el trabajo de los policías, todos los estamentos del Estado deben complementarse y articular fuerzas para llevar seguridad al vecino. Y que la Justicia aporte lo suyo, porque si un delincuente roba hoy y mañana vuelve a caminar libremente por la calle, de nada servirá el trabajo policíaco, de nada servirán las estadísticas.
Por Nicolás Grimalt (nicolasgrimalt@hotmail.com)