Al artista Jean-Claude Arnault, marido de una académica de la institución, se le acusa de dos casos de violación contra una mujer cometidos en Estocolmo en 2011.
La fiscalía sueca ha presentado este martes una acusación formal por violación contra el artista francés Jean-Claude Arnault, protagonista del escándalo sexual y de filtraciones que detonó la crisis histórica que atraviesa la institución que otorga el Nobel de Literatura.
La acusación se basa en dos casos de violación contra una mujer cometidos en Estocolmo en 2011, según ha señalado en un comunicado la fiscalía, que además ha interrogado a la demandante, al sospechoso y a varios testigos. "Mi opinión es que las pruebas son sólidas y suficientes para una acusación", ha afirmado la fiscal Christina Voigt.
La fiscalía había cerrado en marzo parte de la investigación preliminar abierta después de que el noviembre pasado 18 mujeres denunciaran abusos sexuales de forma anónima, en el principal diario sueco, por parte de un "perfil cultural" muy próximo a la academia. Posteriormente, fue identificado como Jean-Claude Arnault.
La denuncia apuntaba a que Arnault, esposo de la académica y poeta Katarina Frostenson, había cometido abusos sexuales contra varias mujeres en su club literario y en dependencias propiedad de la Academia.
Al estallar el escándalo, la institución cortó la relación con el artista y encargó una auditoría, que concluyó que Arnault no había influido en las decisiones sobre premios y ayudas, aunque el apoyo económico recibido de la academia por su club literario incumple las reglas de imparcialidad al ser su esposa copropietaria.
El informe confirmó también que la confidencialidad sobre el ganador del Nobel fue violada varias veces. Esto desató un conflicto interno que en los últimos meses ha provocado la renuncia de ocho académicos, aunque solo cuatro la han confirmado por escrito.
Presionada por la Fundación Nobel, la Academia Sueca ha impulsado varias reformas, como un cambio en los estatutos para posibilitar la renuncia real de sus miembros y la elección de nuevos. Además de recurrir a un grupo externo de expertos en derecho, resolución de conflictos, organización y comunicación.
La decisión más controvertida fue la de aplazar el Nobel de Literatura, por primera vez en siete décadas. Esto supone que en 2019 se otorgarán dos premios, una medida justificada por la falta de confianza y el debilitamiento de la institución.