Sus dueñas de la localidad de Lymm, en el Reino Unido, comenzaron a notar que Trevor se estaba hinchando. Se lo veía más inflado a cada instante que pasaba, hasta que la situación fue límite: a los pocos minutos, el perro salchicha alcanzó un tamaño tres veces mayor. 

"Se había hinchado como un globo, su cuello y su cabeza parecían una sola cosa, por lo que parecía una foca gorda", contó Jessica Jennings al sitio BBC. Además, cada vez le costaba más respirar. De inmediato, llevó a su mascota a una veterinaria.



A través de los rayos X, los especialistas descubrieron que un agujero en la tráquea hacía que el aire quedara atrapado debajo de su piel. La condición, llamada enfisema subcutáneo, fue rápidamente resuelta por los expertos con una simple operación.

La veterinaria Michelle Coward fue la encargada de desinflarlo: cerró el orificio que tenía el salchicha en la tráquea y el aire se reabsorbió. "Nunca había visto un caso como este antes, fue una cirugía nueva para mí", aseguró. 

"No hubo lesiones externas que explicaran cómo el aire se había acumulado debajo de la piel, por lo que sospechamos que una lesión interna en las vías respiratorias podría haber permitido el ingreso del aire", agregó.