Omar Príncipe, titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), manifestó a Radio Río Cuarto estar “muy preocupados por la situación de los productores agropecuarios, en especial los pequeños y medianos”. El referente agrario se reunió, el 27 de marzo, con Marcos Peña a quien se le expresó que “más allá de que los productores agropecuarios están en una emergencia climática, también viven una emergencia económica, financiera y productiva”.

Después de eso sucedió la corrida cambiaria, la devaluación, el  aumento de las tasas de interés que de acuerdo a Príncipe “tendrán un impacto enorme en los productores agropecuarios, imagínate refinanciar una deuda o financiar una nueva campaña con una tasa de interés del 40% como ha fijado el Banco Central, es imposible para el sector productivo”.

A estos hechos, el titular de la FAA, sumó “la importación de alimentos que venimos sufriendo en varios sectores como el porcino y en economías regionales, el impacto del tarifazo que hace que sea inviable que algunos criaderos de cerdo y tambos sigan adelante y esto complica todo y de allí la reacción de entidades y productores agropecuarios ante la posibilidad de que se cambie el régimen de las retenciones, cuando desde la FAA venimos sosteniendo que es necesario quitarle las retenciones a los pequeños y medianos productores”.

La Mesa de Enlace ha pedido una audiencia con el presidente Mauricio Macri, a quien le quieren manifestar la realidad que están viviendo “y qué propuesta tenemos para salir de la crisis que vive Argentina. Nosotros planteamos que  para el pequeño y mediano productor debemos tener una política pública diferenciada en cuanto a las tarifas y  flete. Tiene que haber un sistema de financiamiento viable para el sector productivo, también hay que retocar al sistema impositivo porque la última reforma impositiva nos trajo como consecuencia pagar más impuestos y sumar más carga fiscal a los productores agropecuarios, que va en contramano de un modelo de desarrollo territorial”.

Príncipe planteó la necesidad de que el Presidente escuche a los productores agropecuarios “porque hay muchas economías regionales que están pasando por una crisis estructural. El campo necesita previsibilidad”.