El economista Claudio Lozano dialogó con Micrófono Abierto y fue consultado por el préstamo que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le otorgará al país.
Fue crítico de la situación financiera de Argentina como así también de la relación retomada por el Gobierno del presidente Mauricio Macri con el FMI.
Dijo que de cada 10 dólares que el país necesita produce 6, mientras que los otros 4 los consigue por endeudamiento o ingreso de capital a corto plazo.
Aseguró que esto es un “agujero de dólares” en las relaciones comerciales y financieras con el mundo de aproximadamente 40 mil millones de dólares. “30 mil millones de dólares se resuelven con deuda y el resto con capital de corto plazo”, enfatizó lo cual aseguró que hace al país totalmente vulnerable a las modificaciones del escenario internacional.
Desde el 14 de mayo hasta comienzos del 2019 hay vencimientos de 54 mil millones de dólares, indicó el economista Lozano.
Fustigó al Gobierno nacional por las corridas bancarias de las últimas semanas y recurrir una vez más al FMI. Aseguró que es una sesión directa de soberanía, transfiriendo parte de la decisión de la política económica a este organismo.
Por otra parte consideró que los desequilibrios productivos y financieros se agravaron en los dos últimos años.
Criticó la política de endeudamiento exponencial, de apertura comercial y financiera y de desregulación. “La desregulación fue de tal magnitud que se les permite a los exportadores no tener plazos para liquidar las divisas de sus ventas a punto tal de casi ni tener certeza de los dólares de exportación que ingresarán a Argentina”, detalló.
Con respecto a los exportadores dijo que han tenido una devaluación que les mejora su renta de exportación pero la gente tiene un impacto en los precios con una inflación por encima del 25 por ciento. “Los salarios, las jubilaciones, pensiones y planes sociales tienen una actualización por debajo de la inflación lo cual indica una caída en el poder adquisitivo”, aseguró.
En tanto, sobre la tasa de interés del 40 por ciento, sostuvo que es el premio a los especuladores para que le continúen prestando dólares al Banco Central pero aseguró que esto termina destruyendo cualquier posibilidad de financiamiento de la actividad productiva.
“Los exportadores y especuladores son los beneficiarios de esta política en tanto el resto de la sociedad se ve complicada en un estrategia que tiende a un mayor ajuste”, concluyó en su duro análisis.