Sobre los precios y las ventas se consultó a tres panaderías de la ciudad.
Una de ellas señaló que tratan de sostener los precios, pero “es imposible con la harina”. Admitió que los clientes se restringen en las compras.
De principio de año hasta ahora aumentó un 15 por ciento el precio del pan. El kilo del pan común ronda los 40 pesos y la docena de facturas varía entre los 70 y 80 pesos.
Por último señaló que a pesar de los aumentos del pan, la venta se mantiene porque es un producto que la mayoría de la gente tiene en su mesa.
En tanto, en otra panadería sostuvieron: “Está difícil, hay pocas ventas”. La bolsa de harina sale más 400 pesos y el último aumento del insumo fue hace una semana.
Por último, la tercer panadería consultada señaló que las ventas siguen normales y sostuvo que la panadería integrada a otro negocio favorece las ventas.