Lo dijo el ingeniero Ulises Gerardo, profesor de Zoología Agrícola de la Facultad de Agronomía y Veterinaria de la Universidad y experto en el tema. Señaló que a esto lo maneja el gobierno nacional a través del SENASA e intervienen las provincias a través de la Secretaria.
Ante el registro de mangas de langostas en el sur provincial, se consultó al especialista sobre este fenómeno. Indicó que las mangas que se están viendo son de tercera generación y que por esta época está naciendo la primera generación siendo noviembre el mes de avistaje. “Si no se controlan pueden ser de 200 a 400 veces más grandes”, indicó Ulises Gerardo.
En este sentido señaló que entre las hectáreas inundadas y las langostas, la posibilidad de cosechar lotes se podría reducir a cero.
“Si el gobierno nacional y el provincial no realiza ahora mismo un buen monitoreo y no hacen controles de los estados inmaduros ahora mismo cuando empiezan a eclosionar los huevos puede llegar a ocurrir es un desastre”, dijo y añadió que hasta el momento no se vino trabajando bien.
En este marco dijo que es muy importante porque si estamos hablando del gobierno que tiene la posibilidad de cruzar datos, cobrarle impuestos al que más gana, tiene que saber con el cambio climático hay que ajustar “los tornillos y las tuercas” para que no pasen estas cosas.
Por otra parte, Orlando González, un productor de Santa Catalina, manifestó que el gobierno debe tomar más en serio el tema de las langostas. Señaló que, hace un mes, la plaga se encontraba en el norte de la provincia de Córdoba y ahora se encuentra cerca de Río Cuarto. “Fíjate donde están, cerca de acá. Hace un mes estaban en el norte. Nadie dice nada”, expresó.
Recordó que, durante su infancia en Junín, provincia de Buenos Aires, se implementaba un sistema de chapas y zanjas para que los incestos saltarines queden atrapados en esos surcos. “El ministerio de Agricultura te prestaba esas chapas, las plantábamos en la tierra y cuando quedan atrapadas, luego las prendíamos fuego”, completó.
Mirá:
Otra nube de langostas fue vista el lunes por la tarde al sur de Berrotarán