Los niveles del virus en su cuerpo son tan bajos que no pueden multiplicarse ni transmitirse.
La Conferencia Internacional de Investigación sobre el sida, que se celebra en París estos días, ha revelado el caso de una niña sudafricana de 9 años seropositiva que se encontraría en buen estado de salud sin tomar medicamentos. La niña tan solo fue sometida a un tratamiento durante sus primeros meses de vida, según ha desvelado esta mañana Anthony Fauci, director del Instituto Americano de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés), que trabaja en este caso.
"Este nuevo caso refuerza nuestras esperanzas de poder evitar a los niños VIH positivos la carga de un tratamiento de por vida, tratándolos durante un corto período a una edad temprana", indicó Fauci a AFP, recordando que se trata de una situación excepcional pues tan solo se conocen tres casos similares en niños y resultan aún inexplicables.
La niña fue tratada a partir de los dos meses de vida con antirretrovirales que impiden el desarrollo del virus. Tras diez meses, y en el marco de un estudio, se decidió dejar el tratamiento pues el virus había sido reducidos a niveles prácticamente indetectables. Si bien no se descarta una recaída, el hecho de que la disminución se haya prolongado durante tanto tiempo hace pensar que podría ser duradera. El VIH sigue presente en el cuerpo de la pequeña pero en un punto tan bajo que no podría multiplicarse o transmitirse a otra persona a pesar de la falta de tratamiento.
6.000 especialistas reunidos en París
Esta conferencia reúne en la capital francesa a más de 6.000 especialistas que hacen balance de los avances en la investigación y otras vías alternativas para luchar contra el sida, a la espera de una vacuna que ayude a erradicar o a mantener "dormido" el virus 34 años después de su descubrimiento. En el encuentro se busca igualmente limitar los efectos secundarios de los tratamientos actuales y a mejorar los medios de prevención, cuando eliminar el VIH en un enfermo resulta a día de hoy muy difícil, prácticamente imposible.
Según la ONU, de los 36,7 millones de personas portadores del VIH solo 19,5 millones de personas tienen acceso diario a los antirretrovirales que deben tomar los pacientes, que presentan efectos secundarios como diarrea, náuses o dolores de cabeza. Se calcula que el tratamiento anual cuesta entre 75 y 1000 euros por persona. En 2016, el sida mató a un millón de personas y otras 1,8 millones fueron infectadas.
Los investigadores lamentan que los progresos en los estudios se vean amenazados por una disminución de la financiación sobre el virus, según advertía la Sociedad Internacional del Sida este domingo, reclamando un "compromiso político" que permita dar un impulso a las investigaciones. La alerta viene cuando Estados Unidos, el mayor contribuyente en esta lucha -casi 5 mil millones de euros en 2016, lo que supone dos terceras partes de la financiación estatal a nivel global-, discute en el Congreso reducir esta cantidad en el presupuesto de 2018. Las organizaciones alertan que un recorte de mil millones de euros dejaría sin tratamiento a 830.000 pacientes y podría suponer otras 200.000 infecciones.