Se reprogramarán todos los turnos que no sean de urgencia; reclaman un 26% de aumento salarial; el Gobierno le negó una actualización de cuotas a las prepagas
El sector de la sanidad continúa inmerso en un conflicto que no permite que se cierre el acuerdo salarial para los trabajadores de las clínicas privadas, sanatorios y centros ambulatorios. Entre el miércoles y el jueves de la semana próxima, los trabajadores realizarán un paro que afectará a los 6 millones de usuarios de prepagas. Se reprogramarán todos los turnos que no sean de urgencia.
El reclamo es por un 26% de aumento salarial. El jueves se realizó una reunión en el Ministerio de Trabajo, en la cual se acordó ese mismo aumento para el PAMI y obras sociales. Sin embargo, el sector privado no pudo cerrar el acuerdo.
La traba está en que las clínicas no consiguen el financiamiento que buscan y le reclaman a las empresas de medicina prepaga un incremento de los aranceles por las prestaciones que realizan. Las prepagas, por su parte, esperan la autorización del Gobierno para aumentar las cuotas a los afiliados. Según corresponde a la nueva ley de Salud, las empresas hicieron el trámite para que las dejen subir los valores de sus contratos, pero la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación lo rechazó.
"El Ministerio de Trabajo convalidó la paritaria, y la resolución tiene vigencia para todos los trabajadores, pero el sector privado se declaró en disidencia, porque no consigue la financiación para el aumento. El sistema privado se encuentra con que tiene que pagar aumentos, pero no cuenta con la suba de aranceles correspondiente", explicó Claudio Belocopitt, presidente Swiss Medical, a LA NACION.
Además de la actualización de los salarios, los costos del sector aumentaron por la inclusión de nuevas prácticas, como las generadas por la sancionada ley de fertilización asistida. "Se conoce perfectamente la necesidad de financiación. Es un tema obvio. Por eso mismo este rechazo no tiene sentido. Nos dan cero posibilidad de aumento. Jamás imaginábamos que iba a pasar esto, por eso intentamos negociar hasta último momento. Ahora se va a realizar una medida de fuerza y bueno, nosotros no podemos hacer nada. Tienen que sacar la resolución habilitando el aumento, no hay magia", concluyó Belocopitt.
Según la ley de Salud, todos los años se debe gestionar una autorización para que el Gobierno habilite una suba de cuotas de los afiliados de las prepagas. El trámite es gestionado ante la mencionada Superintendencia de Servicios de Salud, aunque debe dar su visto bueno el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.