Para fugarse del Complejo I del penal de Ezeiza , los 13 presos debieron atravesar numerosos obstáculos. La cinematográfica huída fue descripta por Víctor Hortel, jefe del Servicio Penitenciario Federal, quien hoy presentó su renuncia .

Según Hortel, los prófugos realizaron un boquete de 40 x 22 cm en la celda 22 del módulo 3. Para eso, debieron romper unos 30 centímetros de hormigón armado. Allí cavaron un pozo de un metro de profundidad, que conectó a un túnel de 2 o 3 metros de longitud. La tierra extraída para hacer el túnel fue hallada en la celda.

A través del túnel, salieron a la parte exterior del módulo. Allí recorrieron 30 metros hasta el primer alambrado perimetral. Luego otros 40 metros atravesando otros tres alambrados, dijo Hortel.

Las cercas fueron atravesadas cortando o abriendo los alambres. Por el momento se desconocen más detalles de la huída. Gendarmería Nacional se encuentra realizando una inspección en la cárcel.