El caso del robo en París a Kim Kardashian se ha salido tanto de las manos entre dimes y diretes que la celebridad estadounidense ha decidido zanjar la polémica presentando una demanda contra los que aseguran que el incidente fue todo una invención. En concreto, la querella es contra MediaTakeOut.com, el portal de corte sensacionalista que ha publicado que el ataque que le costó millones de dólares a Kardashian fue un montaje para cobrar el dinero del seguro.
Kardashian, de 35 años, presentó la demanda en una corte federal de Nueva York por lo sucedido en su apartamento de París el pasado 3 de octubre, cuando un grupo de individuos encapuchados la robaron a punta de pistola, llevándose joyas por valor de más de 10 millones de dólares.
"Después de ser la víctima de un horrible y traumático robo a mano armada en Francia, Kim Kardashian regresó a Estados Unidos para ser una víctima de nuevo, aunque esta vez a manos de un tabloide digital sensacionalista que publicó una serie de artículos en octubre que la llamaban mentirosa y ladrona", asegura la demanda contra el portal y contra su fundador, Fred Mwangaguhunga.
Todavía no se sabe la cantidad que busca Kardashian en concepto de compensación por la presunta calumnia. Sí se sabe que en el seno de la familia consideran el robo como una llamada de atención, según dijo Khloe Kardashian en una entrevista reciente, y que están estudiando la opción de cambiar un poco su estilo de vida.
Sería un conflicto, eso sí, con su modus operandi, puesto que gran parte de sus ingresos derivan de esa política de puertas abiertas que ha supuesto la existencia de reality shows sobre su vida privada, además de actividad constante en redes sociales sobre sus actos, fiestas y costumbres en casa. Casi todo lo comparten con sus millones de seguidores y es algo que creen que ha podido derivar en el robo en París.
"Es una llamada de atención para que haga un montón de ajustes de tipo personal", dijo Khloe en el programa de Ellen DeGeneres en referencia a su hermana. Asimismo, añadió que Kim no lo está pasando bien y que aún sigue traumatizada por el asalto.

El Mundo