Un video local del programa Secretos Compartidos se viralizó a nivel nacional. La rapidez con la que difundimos los errores, sobre todo del uso de ciertas palabras, nos desnuda como sociedad.
COGER... repita coger hasta el cansancio y no se sonroje, ni avergüence, que la gente coge, fornica, folla y hasta hace el amor...
COGER... repita coger, vamos dígalo con orgullo, sin sonrojarse, que coger es humano, aunque nos hayan querido hacer creer que es un pecado...
Vivimos en una sociedad tan pacata y conservadora que viralizamos un video con la equivocación de una palabra y nos causa gracia que en el error de decir coger por comer se arma todo un batallón de reproducciones que repiten una y otra vez COGER...
Parece que cuando estos hechos suceden hay una conducta humana que necesita mostrarlo una y otra vez para que el COGER se reitere y nos engolosinemos en esa palabra y todos los significados que les hemos atribuido...
Hoy todos se cogieron al coger de una persona y en esa orgía del vocablo mostramos nuestro lado más prejuicioso, de lo que no decimos, de que no podemos equivocarnos, de que hay cosas que son humanas y sin embargo siguen mirándose con los lentes de lo incorrecto y lo pecaminoso.
En 24 horas de reproducción de un video de un programa escuché todo tipo de comentarios, por supuesto muchos de ellos misóginos, con un elevado tinte sexual que caen en lo más burdo y bajo de lo que somos, y en el intento de explicar graciosamente una tonta equivocación se pintan de cuerpo entero las almas, las que siempre piensan mal de todo, las que no entienden que un error es eso y que tenemos miles de furcios por día, pero simplemente no tenemos una cámara perversa que capture el momento y una mano poco amiga que vuelva monstruoso un hecho cotidiano como el de equivocarse.
No puedo obviar decir que soy amiga de la involucrada y por eso me duele esta sobreexposición de una persona que siempre ha tenido un perfil bajo más allá de ser una de las protagonistas más reconocidas de nuestra televisión y me afecta porque conozco a esta persona que durante años se ha destacado por su labor coherente, iluminada, solidaria, porque se debería viralizar todos aquellos gestos y acciones solidarias y amorosas que no tienen cámara y que hablan de quién ella es…
Nadie niega el hecho gracioso, pero que de allí se cree un monstruo imposible de parar hay una simple decisión que es la que tomamos cuando compartimos o no un video o una foto de alguien que podríamos ser nosotros.
La pregunta es, ¿cómo nos sentiríamos nosotros en la piel de la protagonista hoy?. Quizás la respuesta, dimensionando lo que se generó, nos determine nuestro accionar.
Yo veo Secretos a toda hora, después de comer y después de coger…