En la marcha más convocante de los últimos tiempos, el sindicalismo opositor, encabezado por las CTA y con la participación de los gremios de Bancarios, Camioneros, la UOCRA y otros, anunció que transitan el camino hacia un paro nacional contra el gobierno de Mauricio Macri. "Si no escuchan los reclamos, habrá paro", dijo Pablo Miceli, del sindicato ATE de trabajadores estatales.

Decenas de miles de personas llegaron esta tarde a la Plaza de Mayo para protestar contra el "ajuste" del Gobierno de Mauricio Macri y mostrar la preocupación por las fuentes de trabajo. El acto es la culminación de la Marcha Federal, organizada por la CTA y acompañada por agrupaciones de izquierda y un grupo de gremios de la CGT, que llegó a su fin con un acto central en la Plaza de Mayo. 

Desde hoy temprano, las primeras marchas complicaron el tránsito porteño y también en algunos localidades de la provincia de Buenos Aires. 

Desde las 7, agrupaciones de izquierda cortaron Corrientes y Callao. Allí, dirigentes del Partido Obrero, del MST y del PTS, impidieron el tránsito vehicular. Desde media mañana, se instalaron en la zona del Obelisco, complicando el paso en las avenidas Corrientes y 9 de Julio.

A pocas cuadras de allí, en el cruce de 9 de Julio y avenida Belgrano, comenzaron a juntarse para ir hasta la Plaza de Mayo diferentes organizaciones sociales.

La Avenida de Mayo, desde Congreso hasta la plaza donde se realizará el acto central, se están agrupando diferentes gremios pertenecientes a la CTA, central obrera convocante de la marcha.

Desde anoche, manifestantes mantienen una vigilia con cortes en los puentes de acceso a la zona de Puerto Madero. Con ollas populares, pequeñas fogatas y algunas carpas, las agrupaciones nucleadas en el Frente de Organizaciones en Lucha pasaron la fría noche en los cinco puentes situados en avenida Córdoba, Perón, avenida Belgrano, Estados Unidos y avenida Brasil.

En la provincia de Buenos Aires, grupos piqueteros se establecieron en la Ruta 3 y Abdala, partido de La Matanza.