Mbah Gotho, que nació el 31 de diciembre de 1870, tiene su tumba excavada desde 1992 y dice estar preparado para morir.
Tiene 145 años, vive en Indonesia y acaba de ser reconocido, aunque extraoficialmente, como el hombre más viejo del mundo, un honor que, hasta ahora, correspondía a otra veterana francesa, que llegó a cumplir 122 años y falleció en 1997.
Las autoridades indonesias acaban de confirmar la validez de los documentos de identidad aportados por Mbah Gotho para probar que, efectivamente, es el humano más longevo. En su DNI (expedido en 2014) consta que nació el 31 de diciembre de 1870 en Sragen, en la isla de Java.
Gotho ha sobrevivido a sus 10 hermanos y a sus cuatro esposas, la última de las cuales falleció en 1988. También han muerto ya todos sus hijos, y sus nietos, bisnietos y tataranietos son ya "todos independientes", dice al diario británico Mirror.
"Sólo quiero morir", lamenta el anciano. Uno de sus nietos asegura que su padre lleva preparándose para ello desde que tenía 122 años. De hecho, su tumba está lista desde 1992, cerca de las de sus hijos. Han pasado 24 años pero parece que aún no le ha llegado el momento.
Para que se corone con el título de veterano mundial falta el reconocimiento por parte del Libro Guiness de los Récords. Hasta entonces, se une al club de los más viejos extraoficiales, con James Olofintuyi, un nigeriano de 171 años, y Dhaqabo Ebba, un etíope de 163.