Lo primero que debes hacer es comenzar a diferenciar entre ‘’alimentarte’’ y ‘’nutrirte’’. Muchas personas comen a diario para poder vivir, pero pocas saben qué es lo que deberían comer para realmente brindarle a su cuerpo lo que necesita para nutrirse. Por esta razón es que encontramos cada vez más gente con sobrepeso, desnutrida.
Para ayudarte a ordenar lo que debes aprender sobre alimentación, leé la siguiente información, toma nota y comienza a cambiar pequeños aspectos en tu vida que te beneficiarán enormemente.
Habrás escuchado alguna vez de los macronutrientes o de las proteínas, grasas e hidratos. Estos nunca pueden faltarte, siempre deben estar presentes en tu día correctamente distribuidos. Es decir, debes comer a diario proteína, grasas y carbohidratos en su cantidad y horarios correspondientes.
Las proteínas inclúyelas en todas tus comidas, su función es estructural y te ayudarán a construir músculo, a repararte de cualquier desafío y a controlar tu apetito. Puedes encontrarla en fuentes animales como ser carnes de vaca, cerdo, pescado, pollo y fuentes vegetales como ser la soja, lentejas, entre otros.
Las grasas, existen las malas y las buenas. Debes incluir las buenas por supuesto, ya que ayudan a cambiar tu composición corporal, controlar el colesterol, circulación sanguínea y no engordan... Solo hay que tener cuidado en combinarlas con los alimentos adecuados y en cantidades adecuadas. Las grasas buenas son como por ejemplo, el aceite de oliva, nueces, salmón, palta y más.
El enemigo principal son los carbohidratos refinados y el azúcar.
Los carbohidratos son la fuente principal de energía inmediata, por eso mismo debemos consumirlos cuando gastamos energía, ya sea haciendo tareas de la casa, lavando el auto, de compras o haciendo ejercicios. Pero tenemos que tener cuidado en consumirlos si vamos a estar quietos para que no los depositemos como grasa. No debemos eliminarlos por completo sino saber elegir cuáles y cuándo comerlos, esto es clave. Debemos elegir carbohidratos complejos como arroz integral, avena, harina integral, frutas, verduras. Debido a su complejidad lleva más tiempo digeridos y te sacian más.
Debido a los efectos que generan los alimentos en nuestro organismo, principalmente por la liberación de insulina, es que es recomendable que optes por consumir carbos y proteína en la primera parte del día y grasas y proteína en la segunda parte.
Debes comer cada 3 horas, de esta forma tu metabolismo se mantiene activo, regulas tu ansiedad y apetito y esto te permite tener bajo control aquello que sabes que debes comer. Si pasas más de 3 horas sin alimentarte, tu metabolismo se vuelve más lento para ahorrar energía, la cual buscará guardar como oro cuando reciba su próxima comida. Y, adivina cómo la protegerá. Sí, convirtiéndola en grasa, el tejido que por excelencia se nos ha brindado para la supervivencia. Entonces, no pases hambre, respeta los horarios y verás que puedes tener el control.
No debes comer de más. Como dijimos, nuestro organismo fue hecho para la supervivencia, lo que explica que al recibir los componentes de una comida, trata a los mismos como si fuesen oro, tomando lo que necesita de ellos en el momento y almacenando el resto por si las dudas. Es así que nuestro cuerpo puede aprovechar hasta cierta cantidad las propiedades de los alimentos, mientras que todo lo demás lo guardará en forma de grasa. Por esto es clave que controles y midas las cantidades, incluso mucho de lo bueno puede volverse malo si lo consumes en exceso.
Comienza de a poco a incorporar lo que vas aprendiendo y te sorprenderás de lo que logras. A la frase dime qué comes y te diré quién eres… Le agregaremos, come lo que debes para ser quien quieras ser.
Bon Apetit!