Ayer jueves el concejal del partido Respeto, Pablo Carrizo, publicó en su cuenta de Facebook una invitación para que la población participe de la nueva asamblea en el Concejo Deliberante Ciudadano que se llevará a cabo en el Club Maipú a las 18, para discutir sobre una nueva propuesta para la realización de la planta depuradora de efluentes cloacales -según la Ley 10208 las obras de tamaño magnitud necesariamente requieren además del estudio impacto ambiental, que la ciudadanía lo audite-.

Respeto quiere que la población de Río Cuarto “conozca qué tipo de planta se quiere instaurar, la empresa, los plazos, el costo energético, la esencia ambientalista que carga el proyecto”.

El fondo de la cuestión es que a la organización le llegó un proyecto que cuesta la mitad y que ya está funcionando en muchas ciudades de la región como en Adelia María, General Deheza, San Basilio, Venado Tuerto y a nivel país en Puerto Madrin. De acuerdo a la planta propuesta por Respeto, “Lagunas facultativas” llevaría una inversión de unos 250 millones pesos, mientras que la planta que propone el Gobierno sale 400 millones de pesos. “Son números que los vamos a leer en los periódicos, pero siempre terminan siendo mayores. Además, con un mantenimiento gigante, estamos hablando de 30 técnicos especializados en mantener esta planta”, dijo Carrizo.

Según explicó, el proyecto que proponen desde la provincia "es un tratamiento biológico forzado, lleva maquinarias, licuadoras, playas de secado, un tratamiento tecnológico donde lleva una energía que se va a consumir" y "no hay dudas que se va a notar mucho en la boleta del Emos”.

A diferencia de la planta que quiere traer la provincia, esta nueva propuesta, después del propio proceso deja el agua casi transparente y sirve para diferentes sistemas de riego. O a su vez, para regar el parque de plantas que se debe colocar a su alrededor para la purificación del aire. El agua de los “lechos percoladores” -la propuesta del gobierno- finaliza nuevamente en el río y no termina de eliminar virus que causan enfermedades a los humanos.

Según el concejal Carrizo el proceso de las Lagunas facultativas "es natural" y "se aprovechan los rayos de sol para decantar los microorganismos". “Llama la atención que sea un proyecto que nunca se trató y que está funcionando tan cerca”, cuestionó.

En cambio, la planta de lechos percoladores está funcionando en Carlos Paz y “tiene mucho gasto". "Si se rompe el agua sucia va de nuevo directo al río. Queremos implantar una planta súper compleja, tecnológica, en esa falla una cosa y hay que movilizar decenas de recursos para mantenerla”.

Finalmente, propuso si se llegara a elegir la segunda opción, con el dinero que sobra “se pueden invertir en otras cosas que también hacen falta".


Informe16