El arrestado fue identificado como Roberto Ángel Cabrera y figura como registrado en el monotributo en la categoría D, que habilita para facturar hasta 48 mil pesos anuales. No obstante, se encontraron 500 mil pesos y seis mil dólares en poder del supuesto infractor, guardados en una caja de zapatos, informó la Afip.

El allanamiento fue ordenado por el Juzgado Federal Nº 1, a cargo de Ricardo Bustos Fierro.

La denuncia fue canalizada a través del fiscal federal de Córdoba, Enrique Senestrari.

El predio se encuentra en el kilómetro 313 de la ruta 19 y la explotación estaba a cargo de un "mediero" de nacionalidad boliviana.

Senestrari informó a La Voz que en el momento de la inspección se encontró a medio centenar de personas trabajando "en condiciones deplorables", entre ellas, cuatro menores de entre 10 y 12 años.

El funcionario judicial también apuntó que alrededor de la mitad de los liberados son ciudadanos de Bolivia. Todos laboraban en "negro", sin un horario determinado y por unos 150 pesos por día, precisó la Afip a través de un comunicado.

Además de la detención, "se secuestró una cantidad importante de dólares y pesos", acotó el fiscal.

Unos 40 funionarios de la Afip actuaron en el procedimiento, acompañados por agentes especializados en trata de personas, además de efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria.

La explotación infantil en los cortaderos de ladrillos es una situación que se repite desde hace años en Córdoba (ver Trabajo infantil: no cede en Córdoba el cepo a la niñez).

En Río Cuarto

Por otra parte, la Unión Obrera Ladrillera (Uolra), realizó inspecciones en 35 cortaderos que funcionan en el barrio Las Quintas, de Río Cuarto.

El secretario gremial de la entidad sindical, Leandro Vallejos, aseguró que "se relevaron unos 200 trabajadores, todos en `negro`'; el 95 por ciento de ellos, de nacionalidad boliviana".
No se registró la presencia de niños explotados laboralmente.

El dirigente sindical indicó que la Uolra "ha tomado la decisión de profundizar las tareas de inspección con el objeto de revertir gradualmente las condiciones de explotación" que sufren quienes aportan la mano de obra para la producción de ladrillos.

Cabe precisar que se entiende por trata al comercio ilegal de personas con propósitos de esclavitud reproductiva, explotación sexual, trabajos forzados o cualquier forma moderna de sometimiento.
 
Fuente:_ LA VOZ