Activistas de todo el mundo interpretaron como un "cambio de tono" positivo de la Iglesia Católica que el Papa dijera que no tiene por qué juzgar a los homosexuales
Las declaraciones de Francisco sobre los homosexuales, en su vuelo de regreso hacia el Vaticano desde Brasil, fueron recibidas ayer con optimismo por parte de la mayoría de los movimientos en defensa de los derechos de los gays, que destacaron el tono "amable" y las "buenas intenciones" del Papa.
En una conversación con varios periodistas que lo acompañaban en el avión, Francisco señaló anteayer: "Si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo? "
La frase fue interpretada por algunos como un "cambio de época" en la Iglesia y las reacciones no se hicieron esperar. La directora ejecutiva de DignityUSA, la mayor organización de católicos homosexuales de Estados Unidos, Marianne Duddy-Burke, señaló que esta postura supone sin duda un "cambio de tono amable" por parte de Francisco. "Espero que esto se materialice en una comunicación más directa con la comunidad LGBT (lesbiana, gay, bisexual y transexual) católica", agregó.
En México, el obispo de la norteña ciudad de Saltillo y reconocido defensor de los homosexuales, Raúl Vera, celebró las declaraciones del Papa y pidió a los católicos y cristianos que "reconozcan la dignidad de los gays y lesbianas". Un 78% de los mexicanos, además, dijo estar a favor de la postura expresada por el Papa, según una encuesta divulgada por el diario Reforma.
También en Brasil movimientos en defensa de los derechos de los homosexuales y teólogos interpretaron como un paso importante de la Iglesia las palabras pronunciadas por Francisco. "Son un soplo de esperanza", afirmó el teólogo brasileño Frei Betto. "Él envía el mensaje para sus fieles de que los dogmas de la Iglesia no pueden ser usados para justificar la violencia y la discriminación", dijo el coordinador del programa Río Sin Homofobia, Cláudio Nascimento, al diario O Globo.
Desde Francia, la asociación de gays católicos David et Jonathan aplaudió "el nuevo tono" utilizado por el Papa.
Si bien hubo muchas reacciones positivas a las palabras de Francisco, también hubo grupos que se mostraron escépticos. "[Los dichos] son valorables en la forma, pero en el fondo no hay nada nuevo bajo el sol", opinó Rolando Jiménez, presidente del Movimiento por la Liberación Homosexual en Chile.
En la Argentina también hubo reacciones de distintos sectores.
"Se puede advertir una disminución de la intensidad en el enfrentamiento que ha tenido históricamente el Vaticano con respecto a las personas homosexuales", expresó, César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA). "Esperamos que estas declaraciones se ratifiquen con políticas vaticanas", añadió.
En tanto, Pedro Robledo, el militante del PRO e integrante de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans que fue golpeado el año pasado por su condición sexual, dijo que "comienza un nuevo mundo".
"Como gay y católico tenía dudas sobre si debía seguir participando y yendo a misa. El mensaje del Papa me sacó todas las dudas", agregó.