En un bosque de Bosnia-Herzegovina encontraron una roca esférica gigante que abrió un debate entre arqueólogos. Es que el autoproclamado arquéologo Semir Osmanagich (conocido también como el Indiana Jones de Bosnia) sostiene que dicha roca “podría probar la existencia de civilizaciones pasadas, hasta ahora desconocidas”.
"Es la mayor piedra gigante descubierta en Europa y prueba la existencia de avanzadas civilizaciones que vivieron en los Balcanes en un pasado lejano, de las que jamás tuvimos registro alguno", asegura Osmanagich.
Pero no todos los científicos están de acuerdo con la teoría Osmanagich: muchos ponen en duda su título de arqueólogo (lo acusan de ser aficionado) y también su hipótesis sobre la civilización perdida.
Sin embargo la roca, que se estima pesa más de 30 toneladas, está ubicada en el Parque Arqueológico Pirámide del Sol de Bosnia y es visitada por miles de turistas.
"La mayoría de las piedras esféricas están ubicadas cerca de la pequeña ciudad de Zavidovici (en el centro del país)", explica Osmanagich. "Solía haber unas 80 de estas piedras en la década de 1930 (...) pero la mayoría fueron destruidas en los 70, luego de que algunos rumores dijeran que ocultaban oro en su interior. Otras se las llevaron los pobladores locales".
En el caso de esta roca, sus materiales "todavía no han sido analizados, pero sus colores marrón y rojizo revelan un alto contenido en hierro. Si las pruebas de laboratorio muestran un contenido en hierro mayor, entonces estaríamos ante la mayor piedra esférica del mundo, superando a aquellas halladas en Costa Rica (30 toneladas) y México (40 toneladas)".