Los agricultores expandirían el área destinada a la soja en Brasil por noveno año consecutivo, según la opinión de analistas y de grupos agrícolas locales, pese a que los precios del principal producto agrícola exportable del país cayeron un 25% respecto del año pasado.

Hasta no hace muchos meses, algunos analistas consideraban que la combinación entre los bajos precios de la soja y el alza en los costos de semillas y fertilizantes podría llevar a los agricultores a no incluir nuevas áreas para la campaña 2015/2016 por primera vez en casi una década. Pero la mayoría ahora ha cambiado sus perspectivas de cara a la siembra que comenzará en septiembre.

"No veo cómo podríamos registrar un declive en el área de soja", dijo Luiz Fernando Gutiérrez, analista de soja de Safras & Mercado. El experto dijo que los precios del maíz y del algodón eran incluso inferiores que los de la soja.

Fernando Muraro, analista de la consultora AgRural, espera un modesto incremento de 500.000 hectáreas en la superficie destinada a la soja en Brasil, respecto de los 31,5 millones de hectáreas sembrados en la campaña 2014/2015. En abril, el especialista había proyectado un área de siembra estable.

Según explicó, la revisión de sus cálculos llegó luego de que la segunda cosecha de maíz brasileña (el país tiene dos zafras por campaña) resultó mayor a la esperada y redujo los precios locales del cereal, lo que -según dijo- llevaría a los agricultores en el Sur a optar por la soja.

Gutiérrez, por su parte, estima un alza de un 2% en la superficie destinada al cultivo de soja. En cuanto a la tasa de crecimiento anual, las previsiones de Safras & Mercado y de AgRural serían las más bajas desde 2006, el último año en que el área de siembra de soja disminuyó en Brasil.

El director de la consultora Céleres, Anderson Galvão, dijo que aún "prevé una estabilidad" en el área destinada a la soja, aunque la firma todavía no elaboró un informe formal de perspectivas para la nueva campaña.


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