Karím pasó por cinco operaciones, un paro cardiorrespiratorio y más de seis meses en cama, pero nada logró aplacar su curiosidad por la tecnología.

Durante el tiempo que duró el reposo comenzó a investigar por Internet cómo funcionaban distintos dispositivos para poder llevarlos a cabo una vez que recobrara su total movilidad.

Su papá, Pablo Kfoure, contó a La Voz del Interior que el adolescente comenzó comprando algunas piezas, fabricando a mano otras, y de a poco diseñó la totalidad de la impresora.

“Comenzó cuando tenía 14, pero empezaron sus problemas de salud. Hoy a los 16 ya está recuperado y tiene su impresora funcionando”, dice el papá.

Cómo funciona

Karím cuenta con sencillez algo que para muchos es difícil de entender. “Básicamente la impresora lo que hace es ir derritiendo y depositando capa tras capa de plástico sobre un carretel que se mueve”, apunta.

Para recibir las órdenes de lo que se quiere “imprimir”, la máquina se conecta a una computadora que le indica las coordenadas. “El diseño lo puedo hacer yo con algunos programas pagos o gratuitos o puedo copiar modelos que andan circulando por la Web”, explica.

El aparato permite hacer piezas de hasta 20 por 20 centímetros y 25 centímetros de alto.

Reconocimiento

El padre de Karím relata con orgullo cómo su hijo pudo salir del mal momento de salud gracias a no quedarse quieto y a investigar con extrema curiosidad lo que implica un invento de estas características. “Yo he visto entrevistas en la televisión a profesionales universitarios que han hecho lo mismo que mi hijo y me sorprende porque él sólo tiene 16 años”, dice.

Karím nunca dejó las tareas del colegio y al volver a clases fue distinguido por su esfuerzo y por el invento que había llevado adelante. “La directora de la Escuela Garcia Faure se comunicó con nosotros para felicitarnos y además dio aviso al Ministerio de Educación de la Nación quienes también se comunicaron con nosotros”, dice.

Pablo cuenta que hace tres semanas la secretaria del Ministro Alberto Sileoni les escribió para pedirles más detalles del proyecto y señala: “Ojalá lo reconozcan porque no es muy común que un chico a esa edad piense, desarrolle y fabrique con sus manos una pieza como esta”.

Hacia adelante

Por último, Karím asegura que va a seguir usando la impresora para fabricar nuevas piezas que le permitan mejorar o agrandar su máquina.

En detalle

Qué son las impresoras 3D. Permiten crear en minutos juguetes, piezas y repuestos de maquinaria a partir de un rollo de plástico y un archivo digital.

Desarrollo. Su fabricación no requiere grandes inversiones de piezas, e incluso una parte de sus componentes fueron creados por impresoras 3D.

Lavoz.com.ar