Declararon empleados de SGI por la extracción de documentos en la financiera.
Siete empleados de la financiera SGI, investigada por el juez federal Sebastián Casanello para saber si fue utilizada para sacar del país dinero negro de Lázaro Báez, identificaron ayer ante la Justicia a empleados y cadetes de la empresa cuando sacaban papeles antes de que fuera allanada. En las imágenes se ve saliendo de las oficinas al contador de Báez, Daniel Pérez Gadín.
Ayer el juez Casanello les tomó declaración testimonial a siete empleados de la firma ubicada en Puerto Madero, conocida como "La Rosadita", que perteneció al financista Federico Elaskar, que primero confesó que había usado la empresa para blanquear dinero de Báez y luego se desdijo.
El magistrado busca establecer quiénes sacaron documentos, papeles en changuitos de supermercado, computadoras y attachés de una de las oficinas de la firma del séptimo piso del edificio de Madero Center, en Juana Manso 555. El proceso tuvo dos partes y duró varios días. En unas imágenes se observa el traslado de cajas y papeles de una oficina a otra contigua, ambas de la misma empresa. Y en otro tramo se observa cómo se llevan documentación de la segunda oficina hacia el ascensor.
Las grabaciones fueron registradas entre el 12 y el 20 de abril y fueron puestas al aire el domingo pasado por el periodista Jorge Lanata en su programa de TV Periodismo para todos. Los primeros movimientos de mudanza exhibidos en la televisión son del día 12 de abril, el viernes anterior al domingo en que salió al aire al programa con las primeras denuncias. Y se sucedieron días después hasta horas antes de que el juez Casanello ordenara el allanamiento de SGI con auxilio de Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
El procedimiento policial en la financiera se realizó con cuatro días de demora, el 18 de abril, en medio de una sonora protesta con cacerolas contra el Gobierno. En ese lapso, el juez Julián Ercolini, que tenía una denuncia anterior contra Báez, y Casanello -designado por sorteo ante esta nueva denuncia- dirimían qué juez era competente para intervenir luego del programa de TV.
Después del programa del domingo pasado, Casanello citó a empleados de SGI para ubicar a los que movieron los documentos. Ayer pasaron por su despacho siete de ellos, que declararon hasta después del anochecer. Se les exhibieron los videos de seguridad del edificio y debían identificar si conocían a las personas que entraban y salían de SGI.
Los testigos, cinco mujeres y dos hombres, señalaron entre ellos a Daniel Pérez Gadín, contador de Báez, y al presidente de SGI Gustavo Fernández, que sucedió a Elaskar cuando dejó de la firma. También identificaron en el movimiento de changuitos y paquetes al cadete de la empresa y a empleados de seguridad, dijeron fuentes que tuvieron acceso a las declaraciones testimoniales. No aparecen en los videos ni Báez, ni su hijo Martín, ni Elaskar, ni Leonardo Fariña, el estudiante de contabilidad que trabajaba para Báez que dijo haber intervenido en el blanqueo y luego se desdijo.