Bill Wilkinson, "El Mago imperial", se alejó del grupo racista y permaneció oculto en una isla de Belice habitada por descendientes de africanos y mayas. Es dueño de un valioso complejo turístico.
Un periodista del diario británico DailyMail localizó a Bill Wilkinson, "El Mago imperial" del Imperio invisible, la facción más violenta y numerosa de los Caballeros del Ku Klux Klan (KKK). Estaba dado por desaparecido desde hacía tres décadas.
Wilkinson, quien abandonó su cargo en el grupo racista en 1984, es actualmente propietario de un complejo turístico valorado en millones de dólares en San Pedro, una localidad portuaria de la isla de Cayo Ambergris, la mayor de Belice.
on 72 años, vive tranquilamente junto a la población local: mayas, criollos, mestizos y garífunas (descendientes de africanos y nativos caribeños).
"Llevo una vida maravillosa, me gusta la isla, está llena de gente amable", contó Wilkinson al medio británico. Asegura que los lugareños son conscientes de su pasado y que algunos incluso bromean sobre él y lo saludan imitando la forma de las capuchas del KKK.
Sin embargo, más allá de los gestos simpáticos con los vecinos, su visión del mundo no parece haber cambiado mucho. "Dios me ha mandado mezclarme con otras razas", comentó Wilkinson al Daily Mail. Y agregó que jamás permitirá que sus hijos o nietos se casaran con personas de piel negra ni acepta que personas de razas distintas se mezclen en las escuelas o la iglesia.
"La mezcla de razas es el mayor pecado que uno puede cometer, peor incluso que un asesinato", decía en 1979 el hombre que lideró el Ku Klux Klan durante una década.
Bill Wilkinson organizó centenares de marchas por todos los Estados Unidos para incitar el odio racial, y sugería a sus seguidores que asistieran con armas de fuego, cuchillos y palos. Además, creó un campo de entrenamiento paramilitar para preparar a los miembros del KKK para una"guerra racial".