El equipo integrado por el chef Emiliano Schobert, su ayudante Aixa Cardosio y el entrenador Fernando Orciani logró ubicarse como el mejor de los tres latinoamericanos. Chile fue 22° y Guatemala, 24°, entre los 24 participantes de la ronda final.

El Bocuse d'Or es un evento creado en 1987 por Paul Bocuse, precursor de la nouvelle cuisine y considerado uno de los chefs más importantes de Francia y del mundo.

Desde entonces, Francia se ha erigido como el país que más veces alzó el trofeo, que curiosamente personifica a un pequeño Paul Bocuse sobre un globo terráqueo.

Anteayer, fueron los noruegos, por quinta vez, los que alzaron el pequeño Bocuse de oro. Estados Unidos y Suecia debieron conformarse con sus réplicas de plata y bronce, respectivamente, mientras que los anfitriones, máximos candidatos, terminaron en el séptimo puesto.

Sin embargo, la gran perdedora fue España, que quedó penúltima, y fue el único país europeo dentro de los últimos ocho lugares.

Esta edición fue la sexta en que la Argentina alcanzó el tramo final de la competencia. Schobert tuvo 5 horas y 35 minutos para cocinar dos platos: una gallina de Guinea y una trucha, junto con tres guarniciones y una salsa por plato, como exigía la organización.

Tras prepararse durante más de un año y medio, el chef argentino, oriundo de San Justo, educado en Córdoba y radicado en Bariloche, apostó por un menú inspirado en la estética del viento patagónico para representar al país.

Ante la atenta mirada de los jueces y el público de la ruidosa tribuna (un clásico desde que en 1997 un grupo de mariachis alentó al equipó mexicano), Schobert y Cardosio buscaron tentar a los jueces con una combinación de sabores clásicos franceses, como el foie gras, y sabores típicamente argentinos, como las mollejas con manteca de chimichurri a la parrilla.

La deliciosa presentación le valió a la Argentina 1315 puntos del jurado, que integró Mauro Colagreco, el argentino que tiene el honor de ser el único latinoamericano galardonado con dos estrellas de la guía Michelin y considerado uno de los mejores cocineros de Francia. El país también recibió el premio a la mejor campaña de promoción y el póster diseñado por Pablo Bernasconi obtuvo el segundo lugar..