El Centro de la Industria Lechera (CIL), que nuclea a las principales lácteas, informó que no bajará el precio que se les paga a los tamberos por la leche fluida en las liquidaciones de diciembre, pero advirtió que este escenario es factible en los valores que se reconocerán en enero y febrero.

Es una tregua en un conflicto que comenzó hace unos días, cuando dos industrias lácteas (Ilolay y La Verónica, cuyas plantas fueron bloqueadas esta semana por tamberos) anunciaron que evaluaban reducir el precio que le pagan a los productores lecheros (alrededor de 3,20 pesos) por la fuerte caída en el precio internacional de la leche en polvo, que a principios de 2014 valía 5.000 dólares la tonelada y en las últimas semanas se cotizó a unos 3.000 dólares.

El miércoles, en el Ministerio de la Producción de Santa Fe, la provincia que junto a Buenos Aires y Córdoba concentra el 90% del ordeñe, un grupo de tamberos se reunió con referentes del CIL y se acordó que se solicitará al gobierno nacional que se analicen alternativas financieras para amortiguar esta posible caída en los precios durante los próximos meses.

Los tamberos dicen que no tienen margen para seguir en carrera se el precio se baja.