La empresa mostró el prototipo del "self-driving car", el auto que se maneja solo. ¡Miralo en funcionamiento!
En el final de "Volver al Futuro", el Doc Brown dice la histórica frase: "¿Caminos? A donde vamos no necesitamos caminos". Google parece haberla reinventado, pero esta vez en lugar de caminos lo que no hace falta es un volante. El prototipo de su auto que se maneja solo tampoco tiene pedales. No los necesita, porque es controlado por una computadora y tiene una velocidad limitada a 25 millas por hora (poco más de 40 km/h).
El prototipo de Google, además de tener una simpática cara en el frente, es un diseño biplaza, muy compacto, que tiene algunas similitudes con un Smart. Para manejarlo lo único que hay que hacer es indicarle un destino en Google Maps. "Estos conceptos son muy básicos porque queremos aprender de ellos sobre la marcha. Llevarán a sus pasajeros de un punto A a otro B con solo pulsar un botón. Es un paso importante que va a transformar la seguridad en la ruta y la movilidad para millones de personas" indicó la empresa en un comunicado de prensa. Justamente en el video se muestra el enorme beneficio que un auto así implicaría para una persona ciega o que no pueda manejar. Simplemente se sube al auto, indica el destino y llega. Casi mágico.
Aunque no tenga pedales o volante, el coche de Google tiene sensores que analizan cientos de objetos al mismo tiempo, con una visión de 360 grados y hasta 180 metros de distancia. De todas formas, la empresa fabricará cerca de cien prototipos que incluirán volante y pedales, para darle más seguridad a los conductores. Por seguridad, prepararon los coches para recibir choques, algo que por supuesto podría pasar. Por eso el frente es completamente deformable y está cubierto con espuma, para amortiguar el posible impacto.
La empresa no planea vender los coches sino hacerlos realidad con otros fabricantes, por lo que está buscando socios para llevarlos al mercado. Está es la explicación de cómo funciona el vehículo autónomo de Google.