El organismo internacional compara la situación económica del país con la que atraviesa Venezuela en su informe "Perspectivas Económicas Globales"; alerta por la caída de crecimiento, la inflación y la devaluación.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) emitió hoy un demoledor informe sobre la situación económica que atraviesa la Argentina, la comparó con lo que ocurre en Venezuela, y alertó sobre el aumento de la inflación, la devaluación, y el estancamiento, en un contexto de "alta incertidumbre".
En su informe semestral "Perspectivas Económicas Globales", el FMI pronostica que la Argentina apenas estará por encima del estancamiento con un crecimiento de 0,5% este año y 1% en 2015, mientras que Venezuela, principal productor sudamericano de crudo, tendrá una contracción de 0,5% este año, y caerá aun más en 2015, -1%.
Las perspectivas en el mediano plazo en Argentina y Venezuela "se han deteriorado más", estimó en su informe el FMI, que destaca los problemas de financiamiento externo y controles para crear confianza y despegar la producción en esos países.
Por eso el FMI, que no puede hacer auditorías en Venezuela o Argentina, espera que la economía en esos países "se frene de forma marcada", aunque advierte que el panorama está sujeto a una "alta incertidumbre".
Fuertemente estatizadas, con un relajado control fiscal que contrasta con el férreo control de cambio y de precios, las economías de ambos países ahora enfrentan un huracán monetario e inflacionario, que en el caso venezolano se suma a una ola de protestas contra el gobierno .
"Las medidas adoptadas para gestionar los desequilibrios internos y externos, incluidos los controles de precios, tipos de cambio y comercio, están dañando todavía más la confianza y la actividad económica", cuestiona el informe.
El informe afirma que, pese a las recientes devaluaciones en los dos países y el alza de las tasas de interés en la Argentina, es necesario un cambio de política sustancial para "evitar un ajuste desarreglado".
Venezuela, que cerró 2013 con una inflación de 56,3%, cifra sin precedentes en los 15 años del gobierno chavista y el mayor índice en América Latina, podría terminar este año en 50,7% de incremento del IPC, según el FMI.
La Argentina, por su parte, registró un alza de precios en 2013 estimada en más del 28%, según las consultoras privadas.
Desempleo e inflación
El FMI no hizo proyecciones de inflación para los próximos dos años en la Argentina porque el organismo internacional no confiaba en las estadísticas oficiales. En enero, no obstante, el país accedió a modificar las mediciones del Indec.
Para Venezuela, en tanto, el Fondo prevé una inflación de 50,7% este año y de 38,0% para 2014.
El año pasado, la Argentina terminó con una inflación de 10,6% y Venezuela, con 56,2%, la cifra más alta del mundo.
El índice de desempleo en el país, que fue del 7,1 % el año pasado, subirá levemente en 2014 al 7,6 % y se mantendrá en ese número en 2015, indica el informe. En tanto, el ambiente de crisis económica provocará que la tasa de personas sin trabajo pasará del 9,2 % en 2013 al 11,2 % en 2014 y al 13,3 % en 2015.
En la religión
Además, el FMI reduce en cuatro décimas la previsión de crecimiento para la región para 2014, hasta el 2,5 %, como consecuencia de a los menores precios de las materias primas, las condiciones menos favorables en los mercados financieros y los cuellos de botella en algunas cadenas de suministro.
El Fondo rebaja también el crecimiento previsto para 2015, que será del 3 %, tres décimas menos de lo adelantado hace unos meses.
El informe prevé que la recuperación en las economías avanzadas tenga un impacto positivo en el comercio de América Latina.
Precisa, con todo, que ese impacto se verá mermado por los menores precios de las materias primas, unas condiciones financieras menos propicias y cuellos de botella en las cadenas de suministro de algunos países.
El Fondo hace hincapié, por lo demás, "en las considerables diferencias" en la región.
Menciona, en ese sentido, el caso de México, que repuntará un 3 % este año y un 3,5 % el siguiente tras un débil crecimiento del 1,1 % en 2013. Las perspectivas de crecimiento futuro son favorables gracias a las reformas económicas en marcha, sobre todo en los sectores energético y de telecomunicaciones, asegura el FMI.
Brasil, por el contrario, avanzará lentamente, con un crecimiento anticipado del 1,8 % en 2014 y del 2,7 % en 2015, uno de los datos más alarmantes del informe.
Los problemas en la cadena de suministro, sobre todo en infraestructuras, y la debilidad de la demanda privada reflejan la menor competitividad y la menor confianza empresarial en Brasil, y figuran entre los principales lastres de la economía del país, según el FMI.
Distintas son las cosas en Colombia y Perú, donde se prevé que la expansión continúe "a un ritmo bastante rápido", con crecimientos previstos para este año del 4,5 % y 5,5 % respectivamente.
Sobre Chile, el Fondo pronostica "moderación", con una proyección de crecimiento del 3,6 % en 2014 y del 4,1 % en 2015.
Bolivia, mientras tanto, seguirá creciendo por encima de su potencial en 2014 con un repunte del 5,1 % previsto para este año y del 5 % para el próximo, frente al 6,8 % en 2013.
Centroamérica seguirá sin cambios y su economía se expandirá a un ritmo del 4 % este año y el próximo, y el Caribe lo hará a un ritmo del 3,3 % en 2014 y 2015.
El crecimiento también repuntó en Paraguay en 2013, con una expansión del 13 %, gracias a la recuperación del sector agrícola tras una severa sequía. Sin embargo, para este año el Fondo espera un crecimiento del 4,8 % y para el próximo del 4,5 %.