Se trata de un cápsula del tiempo con tesoros ocultos, que ayer vio la luz después de casi 100 años.
Diarios, monedas, medallas, estampillas, billetes y libros, entre otros objetos, fueron descubiertos luego de abrir el cofre que permanecía oculto debajo del monumento a Cristóbal Colón.
En la apertura del recipiente de plomo se encontraron también dos rollos fílmicos que podrían dar testimonio de cómo se construyó y cómo se armó el monumento que podría volver a ubicarse frente al Río de la Plata.
Es que además de la revelación de esa especie de cápsula del tiempo, el Gobierno Nacional, con acuerdo de la Ciudad, le presentó a la comunidad italiana una nueva propuesta para mudar el monumento frente al Aeroparque.
Entre las reliquias, también hallaron viejos pergaminos, monedas de distintos materiales y diarios de la época argentinos e italianos que muestran las obras y la inauguración del monumento a Cristóbal Colón.
En el acto estuvieron el representante legal del Círculo Italiano, Horacio Savoia, otros integrantes de la comunidad, el escultor Domingo Tellechea –quien dirigió las trabajos para desmantelar el monumento–, el secretario de Presidencia, Oscar Parrilli, Dario Signorini (Fediba), Luigi Pallaro (Feditalia) y Claudio Avruj, subsecretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de la Ciudad.
Los objetos quedaron almacenados en cajas herméticas que fueron remitidas al Museo del Bicentenario, hasta que se decida el lugar para su conservación definitiva.
El cofre había sido enterrado en 1921, cuando comenzó la obra de montaje del grupo escultórico. Testimonios de una época que permanecieron 93 años en perfecto estado.